Chile celebra hoy elecciones presidenciales inéditas

SANTIAGO, CHILE (17/NOV/2013).- Chile realiza hoy unas elecciones marcadas por hechos inéditos como una nutrida lista de candidatos presidenciales y por primera vez mediante voto voluntario. Cerca de 13.5 millones de chilenos están llamados a participar en los comicios, que según muestran los sondeos, la ex mandataria Michelle Bachelet se perfila como favorita.

Por primera vez, la papeleta presidencial contiene nueve candidatos que proponen desde una radical reversión del modelo neoliberal que imperado en Chile desde hace décadas, hasta una prolongación del mismo sistema, pero con algunos ajustes en pro de una mayor equidad.

Cada uno a su estilo, los candidatos presidenciales han tratado de captar la preferencia de los votantes potenciales. Sin embargo, según algunos analistas, para Bachelet —con más de 30 puntos de ventaja sobre su más cercana contendora, la aspirante oficialista Evelyn Matthei—, la elección de este domingo aparece casi como un “trámite” para acceder a un nuevo mandato de cuatro años (2014-2018). Aseguran que no será necesaria una segunda vuelta.

De acuerdo a la encuesta del Centro de Estudios Públicos (CEP) Bachelet ganaría la primera vuelta de este domingo con 52% de los sufragios.

La ventaja de Bachelet quedó confirmada también por el Pulso Electoral IPSOS, entregado el 7 de noviembre, que ubicó a la candidata de Nueva Mayoría en el primer lugar, aunque anticipando que habría una segunda vuelta el 15 de diciembre próximo.

Pero todo está por verse, porque también hay quienes creen que el descontento popular con los partidos políticos, que según encuestas tienen un apoyo en torno a 20%, puede traducirse en una considerable abstención, lo que afectaría el peso específico del triunfo de cualquier candidato.

Otra novedad de estos comicios es el voto voluntario, que se estrenó en 2012 en los comicios municipales, pero que por primera vez se aplica a un proceso presidencial y parlamentario.

Hoy los chilenos elegirán a su próximo presidente, se renovará la Cámara de Diputados y cambiarán a algunos senadores. Además, se elegirá por primera vez a los miembros de los consejos regionales, los organismos encargados —entre otras cosas— de gestionar los recursos de cada ministerio destinados a las distintas zonas del país.

De resultar ganadora, ya sea en primera o en segunda vuelta, Bachelet agregaría otro récord a su currículum, ya que pasaría a la historia de la política chilena como la primera mujer en ser reelecta presidenta en este país.

• EL SERVICIO ELECTORAL CONFÍA EN DAR RESULTADOS RÁPIDOS

El Servel enfrenta su prueba de fuego

SANTIAGO, CHILE.- Al estar por primera vez a cargo de entregar cómputos “rápidos y certeros” de elecciones presidenciales, parlamentarias y de consejeros regionales, el Servicio Electoral de Chile (Servel) se enfrenta hoy a una “prueba de fuego”.

Patricio Santamaría, presidente del organismo electoral expresó que éste es el “desafío más grande que ha tenido el Servicio Electora en su historia”.

Antes, esta tarea estaba en manos del Ministerio del Interior, pero como consecuencia de una reforma electoral, el Servel se hizo cargo por primera vez de unos comicios en octubre pasado, cuando se celebraron los municipales.

El responsable del Servel admitió que “cuesta prever lo que demorará” el recuento de la votación, pero aseguró que durante la tarde comenzarán a entregar los primeros cómputos oficiales.

“Alrededor de las siete y media de la tarde o con 20% de las mesas escrutadas daremos el pri-mer escrutinio oficial”, anunció Santamaría.

El segundo cómputo se dará a conocer con 60% de las mesas escrutadas “y después con 90% de las mesas escrutadas, se entregará la nueva información”.

EL ANÁLISIS

¿Cómo ganar en primera vuelta?

Maestro Orestes E. Díaz Rodríguez

Michelle Bachelet será la futura presidenta de Chile, pero pocos se  atreven a asegurar que alcanzará el triunfo en primera vuelta.

Muy pocos candidatos lo han alcanzado cuando el listón que coloca la normativa electoral exige sobrepasar la mayoría absoluta de los votos válidos. Cuando el umbral tiene esa magnitud en una competencia entre varios candidatos, el electorado interpreta que va a ser muy difícil que alguno sobrepase la varilla en primera vuelta, y se inclina por apoyar al que representa sus preferencias aunque no sea favorito. El efecto es que el voto se desconcentra forzándose la segunda instancia entre los dos candidatos más votados.

Pero, en ciertas circunstancias, se alcanza a revertir la tendencia dominante. ¿Cómo se logra?

La condición crucial es que la plataforma defendida por el candidato represente un punto de inflexión en la forma en que se venían gestionando los asuntos de Estado, refleje un cambio de  paradigma que se ha venido gestando en las entrañas de la sociedad y de la que se convierte en portavoz. Eso fue  lo que permitió los triunfos en primera vuelta de Patricio Aylwin (1990), Eduardo Frei (1994) y Álvaro Uribe (2002).

En ocasiones también facilitó la consecución del objetivo  que los representantes del viejo status quo, siendo aún mayoría, consideraron improbable el triunfo de “la nueva visión” en primera vuelta y se presentaron a contender divididos. Fue la experiencia del uruguayo Tabaré Vázquez (2004).

Otra es la dinámica cuando el triunfo “anticipado” se consigue desde las filas del oficialismo por presidentes en ejercicio,  Evo Morales (2009), Rafael Correa (2013) y el propio Álvaro Uribe en 2006.

Bachelet, ¿se impondrá en primera vuelta?

La ex presidenta se presenta como abanderada de un cambio de paradigma que la sociedad viene reclamando. El oficialismo no está cohesionado y ha tenido que decantarse por una candidata que no termina de ilusionar a sus propios partidarios. Mientras, por primera vez, el voto no será obligatorio, la tentación de no ir a votar en primera vuelta, donde desde 1994 no se definió un ganador,  es mayor entre los partidarios del oficialismo que entre los que aspiran a un nuevo orden. La combinación de esas circunstancias podría arrojar los márgenes imprescindibles para concretar la gesta. Aunque casi siempre son mucho mayores las probabilidades de avanzar a la segunda instancia, esta ocasión es diferente, existe la posibilidad real de que no se produzca.

PERFILES

• Michelle Bachelet

La médico socialista de 62 años fue la primera ministra de Defensa de Chile, la primera presidente de la República y la primera directora de ONU Mujeres.

Ahora la candidata de la Nueva Mayoría busca colgarse nuevamente el título de mandataria.

El programa de Bachelet promete “educación gratuita y de calidad”, una reforma de la Constitución heredada de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990) y un alza de 20 a 25% en los tributos de las empresas.

Las propuestas de la ex presidenta, apoyada por la misma coalición de centroizquierda con la que gobernó de 2006 a 2010 a la que ahora se ha sumado el Partido Comunista, han sido duramente criticadas por el Gobierno del derechista Sebastián Piñera y por la candidata oficialista, la ex ministra de Trabajo, Evelyn Matthei.

De acuerdo al último sondeo del Centro de Estudios Públicos (CEP), divulgado a fines de octubre, Bachelet llegará a la elección de este domingo con 47% de intención de voto.

• Evelyn Matthei

La vida de la candidata de la Unión Demócrata Independiente (UDI) y ex ministra del Trabajo chilena ha ido en ascenso. A sus 59 años, se perfila como la segunda candidata con posibilidades de ganar las elecciones presidenciales.

Fue elegida diputada en 1989 y en 1993. En el año de 1997 salió como senadora por la región de Coquimbo, cargo en el que fue reelegida en 2005 y al que renunció en 2011 para ser ministra del Trabajo, del gobierno de Piñera.

En varias ocasiones, la candidata derechista ha sostenido intercambios verbales abundantes en groserías con otros políticos, a los que ha llegado a insultar incluso en sesiones parlamentarias.

Aunque tras ser elegida candidata prometió comportarse “de manera ejemplar”, su carácter la ha traicionado a lo largo de una campaña que ha afrontado con encuestas en contra, pero con la fe intacta en que romperá los pronósticos y se enfrentará en segunda vuelta a Michelle Bachelet.

• Marco Enríquez-Ominami

El candidato por el Partido Progresista se disputa por el tercer lugar en las elecciones presidenciales.

Hace cuatro años, el entonces candidato independiente, dio la sorpresa en la elección a la Presidencia de Chile al alcanzar el 20 por ciento del electorado y después creo un partido, pero hoy le cuesta llegar al 10 por ciento de apoyo.

Es el líder de la única fuerza política nacida en la reciente historia de la democracia chilena, que en las municipales del año pasado logró siete alcaldías, entre ellas la de la ciudad fronteriza de Arica.

Hace cuatro años, Enríquez-Ominami irrumpió como un “outsider” en la política chilena; ahora los ciudadanos le conocen, pero su base electoral está concentrada en el norte del país, los jóvenes y los sectores más cultos y acomodados. Por eso, romper los límites sigue siendo su principal objetivo.

• Franco Parisi

Sin un respaldo partidista a sus espaldas, Parisi, de 46 años, se ha propuesto pasar a segunda vuelta en las próximas elecciones.

El candidato independiente, que se define como “un profesor de economía que quiere ser presidente”, ha apostado por una presencia constante en las redes sociales y ha ganado protagonismo en el debate político a raíz de su enfrentamiento con la candidata conservadora Evelyn Matthei.

Parisi está convencido de que puede convertirse en el segundo candidato más votado, por delante de Matthei y del aspirante del Partido Progresista, Marco Enríquez-Ominami.

Se define como “socioliberal”, aunque algunos analistas y buena parte de la opinión pública lo catalogan como un candidato de centroderecha, pero su programa electoral tiene más puntos en común con los planteamientos de los aspirantes progresistas que con los de la derechista Matthei.