Amigos de soldado de EU secuestrado en Afganistán le piden que sea fuerte

WASHINGTON, ESTADOS UNIDOS.- Los amigos de Bowe Bergdahl, el soldado estadounidense de 23 años secuestrado en Afganistán, rezan, junto con su familia, para que vuelva con vida a casa y en un mensaje difundido hoy le pidieron que sea fuerte.

"Bowe, si ves esto, que sepas que te queremos y estamos rezando por ti", dijo Tim Baker, un amigo de la familia al canal de televisión local KTVB-TV, en un mensaje en el que le pidió que "no se sienta intimidado y se mantenga firme".

La familia todavía no ha hecho ninguna intervención después de que el pasado fin de semana se difundieran unas imágenes en las que el soldado aparece con el pelo rapado y vestido con un atuendo afgano en el que reconoce tener "miedo de no poder volver a casa".

Según Baker, ver las imágenes de Bergdahl es algo que "rompe el corazón".

"Es como si uno de nuestros propios hijos estuviera en esta situación", agregó.

Baker señaló que la familia se ha refugiado en la oración y se dirigió a "todos los valientes hombres y mujeres" que sirven en misiones en el exterior pare expresar su apoyo "al cien por cien".

Bergdahl fue capturado el pasado 30 de junio en la provincia de Paktika, al sudeste de Afganistán, informó el Departamento de Defensa el fin de semana.

El Pentágono indicó que Bergdahl quedó clasificado como "en paradero desconocido" el pasado 1 de julio y dos días más tarde se le declaró "desaparecido o capturado".

El soldado integra el I Batallón del regimiento 501 de la Infantería de Paracaidismo, en la 25 División de Infantería, que tiene su base en Fort Richardson, en Alaska.

Sus imágenes en cautividad se han grabado en un vídeo difundido por la cadena qatarí Al Yazira y colgada en Internet en una página utilizada por grupos islamistas.

En ellas el soldado dice ser originario de Idaho y tener 23 años, y cuenta detalles sobre cuándo fue capturado, mientras quedó rezagado durante una patrulla en la provincia afgana de Paktika.

Una persona sentada a su izquierda, y que se oculta en todo momento, enseña a la cámara las chapas de identificación del militar, que se presenta sentado en una alfombra, vestido con lo que parece ser una galabiya (camisa larga hasta los tobillos) gris, primero hablando a la cámara y después comiendo.

Respondiendo a unas preguntas, el soldado cautivo ofrece su punto de vista sobre el estado de la guerra de Afganistán y, entre otras cosas, sostiene: "La historia ha demostrado que esta guerra va a ser extremadamente dura para cualquiera".

El Gobierno estadounidense anunció el pasado marzo una nueva estrategia para Afganistán, que prevé dar prioridad a esta guerra que dura ya ocho años.

Dentro de estos planes se incluye el envío de 21 mil soldados adicionales, lo que dejará en cerca de 56 mil el número de militares estadounidenses destacados en el país centroasiático, y se ha nombrado a un nuevo comandante del contingente, el general Stanley McChrystal, que reemplaza al general David McKiernan.