Tras una revisión al padrón de los centros de trabajo en Jalisco del programa Jóvenes Construyendo el Futuro, se encontró un caos.Se oculta el domicilio de las empresas o tutores que capacitan a los becarios; hay registros que se repiten, como “Paletería La Michoacana” y “Paleteria (sin acento) La Michoacana”; y otros sólo contienen el Registro Federal de Contribuyentes o no se completa el nombre, como “Ayuntamiento”, sin especificar a cuál se refiere.En la Entidad están documentados cuatro mil 261 centros de trabajo, que capacitan a 18 mil 578 jóvenes (reciben tres mil 600 pesos mensuales provenientes del Gobierno federal). De esos espacios, destacan mil 112 personas físicas, pero la información que proporcionan impide saber las actividades que realizan o que verdaderamente existan. Por ejemplo, se registraron sólo como “Jesús” o “José”, también como “Martín Gutiérrez XXXXXX”.Para aclarar estos datos, se pidió entrevista con Merilyn Gómez Pozos, coordinadora del programa en el Estado, pero no se obtuvo respuesta.Las anomalías detectadas por esta casa editorial coinciden con otra investigación de Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad, que ayer reveló que se mantiene la opacidad al tener un padrón con “información improbable, incompleta y no verificable”.María Amparo Casar, presidenta ejecutiva de la organización, detalló que se halló que todos los días se inscribió la misma proporción de hombres y mujeres, y la escolaridad de los becarios también se mantuvo constante.Otras fallas fueron personas físicas, incluso diputados federales (como “María Teresa López Pérez”), que se inscribieron como centros de trabajo.“La información no se puede verificar, no hay datos o una dirección. No tenemos los elementos para decir que está fracasando, pero es un programa que se mantiene en la opacidad… y para que no fracase es necesario tener los datos, evaluarlo, corregirlo”.Casar remató que en la investigación se revisaron cinco mil 439 centros de trabajo de la Ciudad de México, de los cuales no se pudo obtener información en dos mil 881.Entre las anomalías se encuentran la falta de pago, despido de empleados para sustituirlos con becarios, ausentismo, vínculo familiar de los beneficiarios con el espacio de trabajo y amenazas. FundamentoPrestaciónEl programa incluye seguro médico, que cubre las prestaciones en especie que otorgan los seguros en las ramas de enfermedades, maternidad y riesgos de trabajo para los becarios durante el periodo de capacitación, a través del Instituto Mexicano del Seguro Social.Lo anterior, de conformidad con el decreto por el que se incorporan al régimen obligatorio del IMSS.La sombra del fraude se cierne sobre Jóvenes Construyendo el Futuro, uno de los programas estrella del Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), revela un estudio publicado que destapa varias irregularidades.La organización Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI) presentó ayer un informe en el que reporta incongruencias económicas y en los registros de los becados, tanto de los centros de trabajo como los jóvenes inscritos al programa.Con un presupuesto de 40 mil millones de pesos a nivel nacional para este año (asignado por el Congreso), se calcula que se habrá gastado solamente 24 mil 358 millones de pesos a finales de 2019. Esto dejaría un subejercicio de 15 mil 641 millones de pesos en su primera anualidad.La organización, que basa sus afirmaciones en información de la Secretaría de Hacienda y Crédito Pública (SHCP), cuestiona a dónde irá ese dinero sobrante.Otra de las inconsistencias es que el padrón de becarios y centros de trabajo presenta estadísticas improbables.El crecimiento en los registros es continuo, pero sin variaciones; es decir, que prácticamente se registra la misma proporción de hombres y mujeres, de niveles educativos y de edades.“Es un crecimiento absolutamente lineal (en el programa), nunca baja (la participación), ni en Semana Santa, ni en días festivos… todos los días sube el padrón. Eso es estadísticamente improbable”, apuntó la presidenta ejecutiva de MCCI, María Amparo Casar.Según el estudio, basado únicamente en cifras oficiales, al programa se han registrado 900 mil becarios, que perciben tres mil 600 pesos mensuales, así como 157 mil 070 centros de trabajo.Por otro lado, la información pública disponible de la Secretaría de Trabajo y Previsión Social “es poco precisa” a la hora de identificar a los centros de trabajo que brindan oportunidades a los jóvenes.Algunos de los empleadores están identificados de forma vaga. Por ejemplo: “María Cristina”, “Abarrotes Alex” o simplemente “diputado federal”.A juicio de María Amparo Casar, “la información que ofrece la Secretaría del Trabajo es poco transparente y así no puede haber rendición de cuentas ni tampoco evaluación del programa”.Hasta diputadosOtras irregularidades que se detectaron fueron personas físicas, incluso diputados federales, que se inscribieron al programa como centros de trabajo, en los cuales no se ofrecen datos como dirección o teléfono para corroborar su existencia y la labor que desarrollan.Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad realizó una auditoría especial al programa Jóvenes Construyendo el Futuro en la Ciudad de México, la cual alberga un 4.7% de los becarios a nivel nacional, con 42 mil 159 beneficiarios.Y sorprenden las inconsistencias sobre los seis mil 449 centros de trabajo adscritos al programa, de los cuales la organización revisó cinco mil 439.De esos centros, no se logró obtener ningún tipo de información en dos mil 881.“No decimos que no existan, decimos que no pudimos encontrarlos”, puntualizó María Amparo Casar.Asimismo, se descartaron también 843 casos registrados como personas físicas también por imposibilidad a la hora de localizarlos, identificados con nombres como “Candy”, “Jorge” o “Arturo”, sin ningún dato más.“La información no se puede verificar. Cómo vamos a verificar si existe ‘Abarrotes Alex’, si no hay datos o una dirección. No tenemos los elementos para decir que está fracasando, es un programa que todavía se mantiene en la opacidad… y para que no fracase es necesario tener los datos, evaluarlo, corregirlo, en el camino”.En 646 casos se logró identificar una dirección o teléfono, pero al desplazarse al lugar no se encontró el establecimiento.La organización puso de ejemplo algunos casos como el identificado en el padrón como “Refaccionaria Gasca”, donde, en lugar de un taller de mantenimiento automotriz, se encontró un terreno baldío.En 140 casos se logró contactar al centro de trabajo registrado en el padrón, pero al hacer la visita, el responsable afirmó no haberse inscrito al programa.La organización civil reportó también que 166 empresas no quisieron ofrecer información al respecto y 214 aseguraron no haber recibido ningún becario, aún, como parte del programa.Por último, 136 empresas encontradas contestaron haber tenido becarios en el pasado, pero ya no.La investigación en la Ciudad de México arrojó finalmente que sólo 413 empresas contaban con becarios del programa.Finalmente, Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad resaltó que en los centros que sí pudieron visitar detectaron problemas como la falta de pago, el despido de empleados y la sustitución por becarios, ausentismo, discordancia entre beneficiarios registrados y becarios capacitándose, así como retención de parte de la beca.El director ejecutivo de Transparencia Mexicana, Eduardo Bohórquez, expuso que los resultados del estudio evidencian que “un programa que no tiene normas de operación bien diseñadas seguramente va a presentar muchos problemas”. Por eso observó un programa con muchas fallas en su ejecución. “Si los programas grandes están así, si los visibles están así, imagínense cómo están los demás programas”.GUÍAGUÍACausales de baja para becariosSanciones a los centros de trabajoResponsabilidad jurídica En caso de negligencia, incurrir en acciones fraudulentas, caer en falsedad o realizar acciones contra los becarios que violenten sus derechos e integridad, así como del programa y sus lineamientos, se actuará jurídicamente contra el tutor o el responsable ante el programa.En este mes se confirmó el cierre de inscripciones del programa: “Aviso. Hemos concluido con la inscripción al programa Jóvenes Construyendo el Futuro para 2019. Te agradecemos tus ganas de participar”. Así inicia el mensaje que aparece en la pantalla de quien intenta sumarse a la medida desde los últimos días de julio. Habrá nuevas inscripciones hasta 2020.En Jalisco solamente lograron vincular a 18 mil 578 personas; es decir, uno de cada tres espacios proyectados.Y en México no se llegó a la meta de un millón de jóvenes que la secretaria del Trabajo y Previsión Social, Luisa María Alcalde, prometió en mayo pasado. De acuerdo con la página oficial, les faltaron 100 mil personas para lograr el objetivo, aunque quedará un subejercicio millonario.Por otra parte, aunque la Secretaría del Trabajo del Gobierno federal presumió que los registros de Jóvenes Construyendo el Futuro eran considerados como nuevos empleos, el director del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Zoe Robledo, lo descartó.“Están recibiendo un ingreso y tienen seguridad social, pero como reciben una beca no cotizan para el retiro, ni sus jefes aportan las cuotas obrero-patronales”.Contrario a las declaraciones del Presidente Andrés Manuel López Obrador, el titular del IMSS remarcó que los becarios no son empleos nuevos porque el instituto no recauda recursos con ellos.“La cifra de Jóvenes Construyendo el Futuro no la consideramos como empleos nuevos, pero sí hay que mencionar que están recibiendo un ingreso y tienen seguridad social”.Sigue: #DebateInformador¿Qué opina de los programas sociales del Gobierno federal?Participa en Twitter en el debate del día @informador