En 2019, el Ayuntamiento tapatío lanzó el programa “Guadalajara, Ciudad Fresca”, para hacer frente al cambio climático con acciones de reforestación y para disminuir las islas de calor. Para avanzar en esos objetivos, en este año se prevé llegar a 55 mil árboles sembrados en total, informó la directora de Medio Ambiente, Paulina Cervantes.A la fecha se han plantado 35 mil 369 ejemplares en espacios públicos como parques, corredores viales y plazas, entre otros. “Son árboles ya consolidados, arriba de los dos metros de altura… y apostamos por especies locales o de la región”.Lo anterior, a través de programas como #100ParquesGDL, Corredores Verdes, Parques de Bolsillo y Jardines Polinizadores.Las islas de calor en Guadalajara se concentran en las zonas Centro, Cruz del Sur y Olímpica, en donde actualmente se han focalizado los trabajos de reforestación. Esta información se obtuvo a través de imágenes satelitales.“Un espacio con cemento o asfalto tiene, por ejemplo, 39 grados de temperatura. En ese mismo espacio, pero en la sombra proporcionada por los árboles, tenemos una temperatura de 33 grados”.Cervantes aseguró que ya se observan avances en algunos puntos. Uno de éstos es el Paseo Alcalde.“Era una vialidad en la que estaban los automóviles y camiones, el asfalto y la temperatura extrema. A la hora que pones un corredor donde hay arbolado, esa temperatura se verá reflejada en estas imágenes satelitales”.Por medio de esas estrategias, el municipio busca contribuir a que la metrópoli reduzca a la mitad las emisiones de gases de efecto invernadero hacia 2030. “Y para 2050 ser una ciudad carbono neutral”.Guadalajara cuenta actualmente con casi un millón de árboles y 1.3 millones de habitantes. Aunque supera la recomendación de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de contar con .33 árboles por persona, la meta del municipio es que sea uno por habitante, lo cual podría alcanzarse en 2030, declaró la directora de Medio Ambiente, Paulina Cervantes Flores.“Este año esperamos plantar más de 20 mil árboles. Tenemos el objetivo de que tengamos un árbol por persona, esa es nuestra meta. Cada año nos vamos acercando un poco más”.La funcionaria puntualizó que van “paso a paso” aumentando el número de ejemplares en la ciudad, pero sin caer en las reforestaciones masivas de especies con menos de un metro de altura, “que es como se hace en muchas ciudades, pero muchos no sobreviven”.El objetivo podría cumplirse en esta década si se continúa con las acciones de reforestación urbana que ha puesto en marcha la actual administración. “Tenemos un largo camino por recorrer, pero vamos paso a paso”.Aclaró que hay asociaciones como Extra A.C. que contribuyen con las proyecciones. En el caso del Ayuntamiento se concentra en los espacios públicos con árboles de más de dos metros de altura, pero con la colaboración de las organizaciones, la plantación anual promedio es de 50 mil especies.En este año, Guadalajara fue reconocida nuevamente como “Ciudad árbol del mundo”, por las buenas prácticas. “Estamos de la mano con ciudades importantes como Nueva York o París”.El reconocimiento por parte de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación considera también otras medidas como que los trabajadores estén capacitados en técnicas de arboricultura, para abonar y colocar árboles nativos para promover la biodiversidad de la ciudad, construir corredores verdes, incluir a la comunidad, entre otros.Uno de los proyectos importantes es Arboretum de Plaza de Armas, que es el primer museo de árboles en la ciudad. “Es con el que regresamos al Centro Histórico los árboles de gran tamaño, de distintas variedades. Podemos recordar cómo se encontraba la plaza con algunos naranjos de bajo porte... y fueron cambiados por árboles que van a dar sombra”.Como parte de los acuerdos internacionales realizados por el municipio, se encuentra el convenio de colaboración con la Red de Ciudades C40, que se firmó en 2018. A través de éste, Guadalajara se compromete a trabajar con otras urbes del mundo en la reducción de emisiones locales de gases de efecto invernadero. La disminución debe ser del 50% en el 2030 y volver a la ciudad con carbono neutral para el año 2050, así como evitar el incremento de la temperatura global por encima de los 1.5 grados. “Aquí es donde se derivan todas estas acciones para poder cumplir con estos acuerdos internacionales”, subrayó Paulina Cervantes Flores.El documento rector para desarrollar esas estrategias es el Plan de Acción Climática del Área Metropolitana de Guadalajara (PACmetro). “Este documento es el primero en su tipo (en México y entre las ciudades que conforman la Red C40) y conjuga todas las acciones que hace Guadalajara y los municipios metropolitanos sobre el aumento de la temperatura global, evitando que suba los 1.5 grados centígrados”.En el documento están los programas relacionados con el transporte público, con una movilidad más responsable y eficiente. “Todas estas acciones también abonan a que Guadalajara sea una ciudad más fresca”.El proyecto de Mi Macro Periférico, conocido como Peribús, está dentro de las acciones prioritarias del municipio para que este corredor vial cuente con arbolado de gran calado y de especies locales. Esto permitirá que los usuarios de la ciclovía y quienes transitan por las banquetas de esos corredores puedan tener sombra y frescura.Las vías en las que inició el programa de Corredores Verdes (que concluirá con 50), se convertirán en pasillos de vegetación, que a su vez se conectarán con los Bosques Urbanos de Guadalajara y los espacios intervenidos en el programa #100ParquesGDL.La primera etapa consta de 30 corredores, que tienen una extensión de 186.99 kilómetros, en los que ya se plantaron nueve mil 897 especies. Algunos de éstos son:En lo que va de la administración, el Ayuntamiento de Guadalajara ha destinado 80 millones de pesos en obras que permitan contar con edificios públicos “Net Zero Carbon” (cero emisiones de carbono).La directora de Medio Ambiente destacó que, por medio de esta política pública, se impulsan construcciones sostenibles, como el cambio del color de las azoteas. “Por costumbre, en Guadalajara se han impermeabilizado las casas con material de color rojo porque se decía que se parecía a la teja. La teja sí tiene una función de refrescar y de evitar que el calor se concentre, pero el impermeabilizante rojo lo único que hace es asemejarlo… absorbe todo el calor”. Por ello, hacen un llamado a la ciudadanía para que utilice el blanco, con el fin de que absorba la menor cantidad de calor.El Ayuntamiento inició los primeros proyectos que son modelos en los edificios públicos apoyándose del sistema de Certificación EDGE (Excelencia en Diseño para Mayores Eficiencias, por sus siglas en inglés), para que formen parte de la estrategia que permita bajar los niveles de emisiones de carbono durante la fase de diseño, construcción y operación de los edificios.Algunos de los que ya cuentan con estos lineamientos son el Centro de Desarrollo Infantil, el Centro de Estimulación para Personas con Discapacidad Intelectual, la Cruz Verde “Ignacio Allende”, las escuelas de Robótica y de Enfermería, entre otros.Sigue #DebateInformador, participa en Twitter en el debate del día @informador“Guadalajara, Ciudad Fresca”JL
