Contra lo esperado por analistas del sector privado, la economía mexicana creció ligeramente durante el segundo trimestre del año, gracias al dinamismo del sector servicios, por lo que, técnicamente, no entró en una recesión, confirma la estimación oportuna del Producto Interno Bruto (PIB) que realiza el Inegi.El PIB aumentó 0.1% en términos reales entre abril y junio frente al trimestre previo (cifra que contrasta con el retroceso de 0.2% de los primeros tres meses del año).Mientras la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) sostiene que la economía mexicana registrará este año un crecimiento de apenas 1%, “que es una tasa mediocre respecto al desempeño regional”, el Presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) respondió ayer a los analistas que les falló el pronóstico de recesión. Con un tono de festejo, reiteró que México crecerá este año 2 por ciento.Para el secretario de Hacienda, Arturo Herrera, México no enfrenta una recesión, pero sí una desaceleración. Sin embargo, anticipa mejores escenarios en el segundo semestre de 2019.El Presidente Andrés Manuel López Obrador destacó el crecimiento económico del país en el segundo trimestre del año, con lo que afirmó: “No les funcionó el pronóstico de recesión” a los expertos.“Estamos muy contentos porque la economía mexicana está respondiendo... es una muy buena noticia para el pueblo de México”, expresó ayer en la conferencia de prensa matutina, donde mencionó que los constantes señalamientos sobre una eventual recesión sí llevaron a crear dudas e incertidumbre.Reiteró que la economía mexicana “está respondiendo” y experimentó un crecimiento de 0.1% en el segundo trimestre del año. Por eso destacó la importancia “de que el crecimiento se convierta en desarrollo y que la inversión vaya bien, dirigida hacia la población, en especial, a quienes más lo requieren, pues lo que se necesita es una modernidad forjada desde abajo”.Al reiterar que el peso es la moneda que más se ha fortalecido en relación con el dólar, expuso que lo importante es no abandonar la economía popular. Puso el ejemplo de un campesino que en la huasteca siembra su tierra de manera artesanal para después vender jugo de caña.“Esa economía, aunque se burlen, es muy importante. Lo pequeño es hermoso, nada más que en lo neoliberal eso no importa”.A pregunta expresa, el Presidente observó que sigue firme su pronóstico de que el país crecerá 2 por ciento.También subrayó que la inflación va a la baja, que aumentó el consumo de las familias y que los salarios están creciendo en términos reales.Anunció que el próximo 8 de septiembre presentará ante el Congreso de la Unión el presupuesto para 2020, en el que “se mantiene el compromiso de no aumentar los impuestos en “términos reales”.El Presidente expresó que en su segundo año de mandato tampoco aumentará la deuda del país ni los precios de los combustibles o las gasolinas.Y en la segunda parte de su administración, que concluirá en 2024, pronosticó que habrá una mejoría de la producción de Petróleos Mexicanos (Pemex), cuyos excedentes servirán para “impulsar actividades productivas y que haya bienestar”.Hay otra contradicciónCuestionado por la prensa, López Obrador contradijo un informe de la Secretaría de Hacienda, en el que se registraba que el Gobierno federal ha gastado menos de lo presupuestado en sus primeros seis meses.“Yo tengo información de que está bien el ejercicio del presupuesto, porque eso es también algo que se ha manejado sin sustento, que había un subejercicio”.GUÍASegún la Secretaría de Hacienda, en el primer semestre no se gastaron 174 mil millones de pesos que estaban programados.El pronóstico para la región es de 0.5% de crecimiento de su Producto Interno Bruto para 2019, indicó Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina (Cepal).En esta actualización entregada en su sede de la capital chilena, colocó a Dominica, en el Caribe, como el país con mayor crecimiento esperado, al llegar al 9%, mientras que Venezuela tendrá retracción de 23% y Nicaragua registrará un retroceso de cinco puntos.México, por su parte, se estima que crezca 1.0%, en tanto el conjunto subregional de América Central tendrá un índice a la alza de 1.4 por ciento.Bárcena insistió en que la región vive los efectos de la desaceleración económica mundial donde sólo un país, India, muestra crecimiento, mientras el resto de naciones registra descensos.Destacó también el marcado debilitamiento del comercio mundial, donde mayo fue clave, cuando la guerra comercial entre China y Estados Unidos se recrudeció y los dos se impusieron tarifas, lo que afectó a todos los países.Señaló que, de acuerdo con estudios de la Cepal, la “guerra” China-Estados Unidos costará a Beijing 2.2% de su PIB. A Estados Unidos, el precio será de 0.6%, con un impacto en la región latinoamericana de 6% en el primer trimestre de este año. “Un costo fuerte”.Junto a las repercusiones de la “guerra” comercial China-Estados Unidos, citó la caída de los precios de productos agrícolas y de la energía.Advirtió que el peso de la economía venezolana, junto con el de las correspondientes a Argentina, Brasil y México, afectan al promedio latinoamericano.El secretario de Hacienda, Arturo Herrera, afirmó una vez más que México no está en una recesión y consideró que todos los pronósticos que la anticipaban son “mitad ciencia y mitad arte”.Por el contrario, aseguró que durante el segundo semestre del año, se espera una recuperación de la economía nacional.“México no está en una recesión… las acciones que se están tomando van en sentido correcto. Para el segundo semestre se espera un crecimiento positivo con una recuperación”.En una participación inesperada en el marco de la explicación de los Informes de las Finanzas Públicas correspondientes al periodo enero-junio, manifestó que una recesión no necesariamente es una crisis.Como ejemplo mencionó el caso de China, que estaba creciendo al 10% y ante una actividad económica menor, ahora presenta tasas de 5 por ciento.“Las recesiones pasan frecuentemente en el país, en periodos frecuentes, pero en periodos relativamente pequeños”.Al preguntarle si se equivocaron los agoreros del desastre al anticipar una recesión, esgrimió: “Los pronósticos de la actividad económica son mitad ciencia y mitad arte. Yo no voy a expresar juicios sobre ellos. La mayor parte, quiero pensar, se hacen con seriedad”.Aprovechó para explicar las definiciones que existen y que se manejan para determinar si existe una recesión en una economía. Y mencionó que en los medios de comunicación se manejó la definición usualmente aceptada, que señala que se necesitan dos trimestres con caídas consecutivas del Producto Interno Bruto.CLAVESEstudio. El Inegi publicó que la estimación oportuna del Producto Interno Bruto (PIB) trimestral reportó un aumento real de 0.1% en el segundo trimestre de 2019, con relación al trimestre inmediato anterior.Sectores. Por componentes, las actividades terciarias crecieron 0.2%, mientras que las primarias cayeron 3.4%. Por su parte, las secundarias no mostraron variación durante el trimestre abril-junio de este año respecto al trimestre precedente.General. En su comparación anual, la estimación oportuna del PIB con series ajustadas por estacionalidad observó un alza real de 0.4% en el trimestre en cuestión frente al segundo trimestre de 2018.“Nada para celebrar…”El director de estudios económicos de Citibanamex, Adrián de la Garza, dijo que ante el dato de crecimiento de 0.1% al segundo trimestre no hay nada para celebrar y resulta preocupante al mostrar un estancamiento de la actividad económica. “Celebrar que crecimos 0.1% trimestral es cantar victoria muy pronto porque todavía faltan las cifras finales… además, es uno de los crecimientos más bajos que hemos visto en los últimos 25 años”.La economía mexicana “evitó por poco” la recesión técnica, que se declara cuando se tienen dos trimestres consecutivos con decrecimiento. Sin embargo, “es bastante débil, en gran parte por la caída de la inversión”. Si bien el PIB no se contrajo dos trimestres consecutivos, no reporta crecimiento desde el tercer trimestre de 2018, indicó en su reporte la firma JP Morgan.Subrayó que el Gobierno parece que ya reconoció esta tendencia preocupante, por el anuncio de un plan de gastos de 485 mil millones de pesos para acelerar la inversión pública.El banco precisó que el dato del segundo trimestre estuvo impulsado por el sector servicios, que mostró un crecimiento de 1.0% anual en el último trimestre, por lo que el consumo y los servicios “son los únicos puntos saludables de la economía”.Sin embargo, lo que sorprendió en este trimestre fue el desempeño de la actividad industrial, que se mantuvo en el segundo trimestre, lo que contrasta con los datos mensuales, que a partir de mayo apuntaban a una contracción superior al 2.5% en el segundo trimestre.“Es difícil que concilien los datos mensuales y trimestrales, ya que se necesitaría un gran salto de 2.0% de forma mensual en junio para cerrar la brecha entre ambos, y esto parece un resultado muy poco probable. La minería está funcionando mal, la construcción probablemente se mantuvo bajo presión y las exportaciones manufactureras fueron poco estimulantes el mes pasado”.Por lo tanto, destacó, no hay razón para esperar una mejora notable en el sector productor de bienes, así como en aquellos más sensibles a la inversión.Sigue: #DebateInformador¿Qué opina de la política económica de López Obrador?Participa en Twitter en el debate del día @informador
