Obra ''Elba Esther perdió el juicio'' queda a deber al público

CIUDAD DE MÉXICO (17/AGO/2013).- La puesta en escena "Elba Ester perdió el juicio" quedó a deber al público que asistió al Teatro Blanquita la noche de este viernes para ver el estreno, de lo que se anunció que podría ser la obra más divertida de los últimos tiempos, al generar pocas risas del respetable.

Con la nula presencia de la bailarina Niurka Marcos y la ausencia de Gustavo Munguía y sus personajes, la propuesta, que no llega a ser una obra teatral, aburrió a los presentes a lo largo de casi dos horas de sketches forzados en torno a un tema noticioso como el juicio de la ex líder sindical de los maestros, Elba Esther Gordillo.

Lo salvable de la puesta en escena, fue que el actor principal y generador de la idea, Luis de Alba acudió a cumplir su compromiso a pesar de tener principios de neumonía, lo que claramente se vio durante sus intervenciones, primero como "El Pirruris", amigo de Elba Ester y luego como la profesora.

Con un tono en sus diálogos, igual al personaje de "El Chido", Luís de Alba cumplió más a fuerzas que de ganas con la caracterización de la exfuncionaria sindical, ante su patente padecimiento de las vías respiratorias, incluso al final el mismo productor Omar Suárez, se disculpó con el público por las ausencias y por el estado de Luis de Alba.

Con personajes que nada tienen que ver con la historia de "Elba Ester perdió el juicio", como el imitador Roy Ramos y su "Luis Miguel", así como lo múltiples personajes que realizó el actor, Pepe Magaña, confundieron a los espectadores sobre su verdadero papel.

Sólo hasta la segunda parte del espectáculo, es que el público encuentra atractivo el objetivo del show, que es llevar a la comedia el suceso político más escandaloso de los últimos tiempos y donde los mismos actores improvisan para no caer en el tedio del caso.

A diferencia de lo que anunció el productor, Omar Suárez, que involucrarían al público para decidir el final de la obra, la propuesta termino de súbito sin llegar a ello, porque el tiempo de función se les agotó, dejando a una audiencia insatisfecha.