Entretenimiento | Más canto que ópera La OFJ en el Degollado La Orquesta Filarmónica de Jalisco regresó al Teatro Degollado con un programa ortodoxo Por: EL INFORMADOR 25 de octubre de 2008 - 17:56 hs GUADALAJARA, JALISCO.- Ya hacía falta. Después del Festival Internacional del Mariachi, las Fiestas de Octubre y anexas, la Orquesta Filarmónica de Jalisco (OFJ) regresó al Teatro Degollado con un programa ortodoxo. Lo hizo el viernes, para iniciar la tercera temporada del año. Lo hizo bajo el rubro de "El Canto y la Ópera Op. 3". Lo hizo, supuestamente, en vista del éxito obtenido en los dos ciclos precedentes, dado el gusto del público local por los géneros en que participa la voz humana… Condenado, sin embargo, a la maldición de que en esta materia no aplica el adagio de "Querer es poder" y a la adicional de que "Nunca segundas partes fueron buenas" (y terceras con mucha mayor razón), el programa inaugural flaqueó en un punto esencial: la calidad de las voces supuestamente estelares. El balance general, empero, fue aprobatorio por amplio margen… Lo fue, de entrada, por el programa, muy del gusto del respetable. Lo fue por el nivel musical y el equilibrio entre secciones que mostró la orquesta -con su titular, Héctor Guzmán, a cargo de la batuta-, especialmente en la obertura de La Forza del Destino, de Verdi, las Danzas Polovetsianas de El Príncipe Igor, de Borodin, y la obertura de El Barbero de Sevilla, de Rossini. Lo fue, sobre todo, por la calidad que exhibió el Coro del Estado, dirigido por Sergio Hernández, en los fragmentos de Carmina Burana, de Carl Orff, y en los coros de Los herreros, de El Trovador, de Verdi; de Las campanas, de Payasos, de Leoncavallo; de El toreador, de Carmen, de Bizet, y de Los gitanos y de Los toreros, de La Traviata, de Verdi. Lo fue porque Érika Avilés y César Delgado -soprano y tenor, respectivamente- no solo salvaron el Brindis de La Traviata que cerró la función, sino que superaron la muestra que dejaron Alma Rocío Jiménez y Luis Ignacio González. Una y otro quedaron a deber como solistas, por calidad vocal, expresividad y volumen, tanto en los fragmentos de la Carmina Burana en que llevaron carga específica, pero especialmente en Vissi d’arte, de Tosca (ella), y en el Largo al Factotum, de El Barbero (él). Una por el dramatismo que implica, otra por la agilidad -y mil cosas más- que demanda, ambas les quedaron grandes. Lo cual, por cierto, no obstó para que no fueran recompensados con generosas salvas de aplausos. En el intermedio, Sergio Alejandro Matos -entre otras cosas director general, desde su fundación, del Festival Cultural de Mayo (FCM)- recibió la décima tercera edición del "Ave de Plata", con que el Festival Cultural de las Fiestas de Octubre en Guadalajara premia a artistas y promotores de la música sobresalientes. El programa, con el mismo elenco, se repite esta tarde, a las 18:00 horas, con entrada libre, en la Plaza Fundadores. Redacción EL INFORMADOR / Jaime García Elías. Temas Artes Escénicas Artes Orquesta Filarmónica Lee También Celebra la Navidad en escena: Obras y Planes Teatrales en Guadalajara Ferran Adrià dialogará sobre ciencia e innovación en torno a la revolución culinaria Realizan homenaje a Silvia Pinal en Bellas Artes Descubre las arquitecturas que alimentan al mundo Recibe las últimas noticias en tu e-mail Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones