Joaquín Cosío, en la mira de Ignacio Ortiz

CIUDAD DE MÉXICO (25/JUL/2011).- Joaquín Cosío sabe qué hacer para que sus personajes  se queden en la memoria del público, primero como Mascarita (Matando Cabos) y después como Cochiloco (El infierno) el actor es el candidato más firme para integrarse a una versión cinematográfica libre de Antígona, una de las siete tragedias del griego Sófocles. El proyecto se encuentra en manos del realizador Ignacio Ortiz, el mismo de Cuentos de hadas para dormir cocodrilos y Mezcal.

“Se llama La luz y el día y es una especie de adaptación, muy libre, de Antígona, ubicado en el contexto del narco, pero que no necesariamente se trataría sobre ese problema. Espero tener listo el guión en un par de meses, para comenzar el largo túnel del financiamiento. He pensado en Joaquín para que esté en la película”, comentó el cineasta.

La versión original de Antígona cuenta la historia de una joven que se enfrenta al rey de Tebas, quien impone la prohibición de dar sepultura a Polinices, alzado contra el Estado y muerto en una cruenta lucha fratricida. La protagonista desobedece y lanza un puñado de tierra sobre el cadáver de su hermano, proporcionándole así un enterramiento simbólico, actitud que contrasta con la de su hermana Ismene, sumisa ante el poder establecido.

Antígona, por su desobediencia, pagará con su vida, pero arrastrará al soberano Creonte a la desgracia.

Juntos otra vez

Ortiz y Cosío ya trabajaron juntos en el filme Mar muerto, de próximo estreno. El actor encarna ahí a un ex boxeador que trata de reencontrarse con su padre y emprende un viaje para lograrlo.

La cinta se presentó en el Festival Internacional de Cine en Guadalajara (FICG) del año pasado, donde las críticas fueron encontradas. Su estreno comercial en salas nacionales está a punto de concretarse, comentó el egresado del Centro de Capacitación Cinematográfica.

“Estamos esperando que salga un distribuidor. Creo que la ven lenta, eso creo, pero no tengo la menor idea. Si la película saliera con las copias suficientes, que no creo sean muchas, y se proyectara donde debe ponerse (cines acordes al perfil de la historia), creo que le iría bien”, consideró el cineasta mexicano.

Recalcó que Mar muerto no es un proyecto que deba competir en taquilla contra las grandes producciones hollywoodenses, pero que claramente puede defenderse ella misma. “Ya irá apareciendo como mis anteriores películas, que salen y logran gustar”.