Éxtasis colectivo invade Chapultepec

GUADALAJARA, JALISCO (12/SEP/2011).- El clímax del Festival 212 RMX Panamericano llegó cuando el Sol desapareció y 70 mil personas se conglomeraron en Paseo Chapultepec para escuchar a las bandas más experimentadas del maratón musical: Kinky, El Gran Silencio, Disidente, Azul Violeta, Sussie 4 y La Lupita, que fue la encargada de cerrar el mega concierto a las 02:00 de la madrugada de ayer domingo, cuyo mensaje de la radiodifusora que organizó el encuentro sonoro fue el tomar las calles en paz, luego de la ola de violencia que vive el país, objetivo que se cumplió, ya que sólo se presentaron incidentes menores.

Distribuidos en los cuatro escenarios, las bandas tocaron alrededor de 45 minutos cada una, y debido a que algunas se empalmaron, los jóvenes tuvieron que resignarse a no ver a las más aclamadas, pues la distancia que había entre cada escenario, aunado al tumulto, dificultaba el traslado de un concierto a otro.

Si bien había cuatro escenarios distribuidos a lo largo de la avenida, los más grandes e importantes fueron los dos de las orillas, y fue ahí donde se concentró la multitud ya entrada la noche. En el primero, ubicado al cruce con Justo Sierra, la gente aclamaba a Disidente aun cuando Bengala no bajaba del escenario.

“Buenas noches, somos Disidente y hacemos rocanrol”, gritó el vocalista antes de recibir una vibrante ola de éxtasis que los presentes experimentaban. Después de tocar Monitor, Diablo, Feliz, Enemigo, Escala de Violencia y otros éxitos que enardecieron al público, que no dudó en subirse a vehículos, negocios y hasta árboles para tener una mejor visión, la agrupación cedió el escenario a Panóptico Orchestra.

Al otro extremo
En el otro extremo los regiomontanos Kinky congregaron a otra multitud que eufórica bailaba, saltaba y hacía todo cuanto los músicos les solicitaban. “Por la situación que hay ahorita no en todas las ciudades se puede salir a tomar la calle, ¡qué chido que en Guadalajara sí se pueda!”, exclamó Gil, el vocalista.

Enseguida, en el pequeño escenario de Morelos se presentó Vainilla y el tapatío Siddhartha, siendo el primero en concluir casi a la una de la mañana, y en Guadalupe Zuno tocaron Rey Pila y Disco Ruido, que se encargó de cerrar el escenario después de la 01:30 horas.

Para entonar con la maratónica jornada musical, Azul Violeta tocó por casi una hora y media, y aun con gran público dejó descansar el escenario de Niños Héroes luego de hacer resonar sus éxitos, mientras tanto algunos fans corrieron hacia el otro extremo para alcanzar lo último: La Lupita.

“Lupe, Lupe, Lupe” gritaban ávidos de escuchar el legendario conjunto, que está por cumplir 20 años de carrera. Ya habían pasado casi 10 horas del inicio de la fiesta y ahora en Justo Sierra se aglutinaba gran parte de los 70 mil asistentes, que saltó con los hits Jajaja, Hay que pegarle a la mujer, Gavilán o paloma, cortesía de La Lupita, cerrando así el maratónico asalto de conciertos.

Fiesta en paz
Aunque siempre bajo la vista de los oficiales, entre la multitud se suscitaron al menos tres riñas, sin lesionados de gravedad ni detenidos, y una serie de atenciones médicas por caídas, insolaciones y otras afectaciones menores.

Finalmente la fiesta que comenzó a las 16:00 horas y terminó poco después de las 02:00 del domingo fue aprovechado por jóvenes y familias enteras que hasta sus mascotas llevaron para convivir y pasearse por Avenida Chapultepec, que por un día despojó a los vehículos para dar espacio a una multitudinaria exposición cultural-musical.

''Por la situación que hay ahorita no en todas las ciudades se puede salir a tomar la calle, ¡qué chido que en Guadalajara sí se pueda!'', Kinky, grupo musical.

''Vamos a mandar la buena vibra a toda mi gente de México, en especial a la gente de Monterrey, ¡todo mundo con las manos arriba!'', El Gran Silencio, grupo musical.

Asistentes atienden recomendaciones
Todo en orden: vecinos y comerciantes
Vecinos y comerciantes de la Avenida Chapultepec en Guadalajara consideran que el concierto 212 RMX Panamericano ha sido uno de los más ordenados, ya que los entrevistados aseguraron que con eventos anteriores la arteria amanecía mucho más sucia, e incluso todavía se podía ver a algunas personas ingiriendo bebidas alcohólicas.

“Esta vez amaneció más limpio y no encontramos destrozos, porque en otros eventos sí llegaban a rompernos mobiliarios o vidrios. Yo pasé por aquí en la noche y ya había gente del Ayuntamiento limpiando”, indicó Diego Martínez, quien labora en una de las cafeterías de la zona.

Por su parte, la señora Olivia Jiménez, vecina en la calle Guadalupe Zuno, refirió que pese a las molestias del fuerte sonido y el bullicio de los asistentes, las autoridades mantuvieron el orden, y la organización se reflejó en la limpieza.

En un recorrido por el andador central de Chapultepec se pudo observar que la mayoría de las plantas de las jardineras se maltrataron un poco por los pisotones que recibieron, pero fue mínimo gracias a las cintas amarillas con las que se cercaron las mismas para evitar daños importantes. Todavía se encontraron envases vacíos de bebidas embriagantes, vasos, platos y basura en general.

Sin embargo, el mobiliario público no resultó dañado, ni se detectaron mayores afectaciones, tomando en cuenta que la asistencia al evento alcanzó las 70 mil personas. Cabe destacar que hubo una buena coordinación entre la radiodifusora encargada del evento y las autoridades municipales, en el sentido de que estuvieron difundiendo la práctica de separación de residuos. Se colocaron contenedores especiales para tales fines, y al parecer la práctica tuvo éxito, gracias a la difusión que se le dio en la radio.

Leopoldo Pérez, director de Manejo de Residuos del Ayuntamiento de Guadalajar informó que se destinaron 40 personas de la dependencia para las labores de limpieza. Se utilizaron cuatro compactadores de basura, dos camiones de volteo y dos barredoras, maquinaria con la que se recolectaron 19 toneladas de residuos.