El arte cotidiano de la Navidad

GUADALAJARA, JALISCO.- A través de este espacio he manifestado, en repetidas ocasiones, mi interés por mostrar los lugares donde practicamos o contemplamos las artes plásticas de manera cotidiana, y eso lo hacemos sobre todo cuando se trata de tradiciones. Quizás, de todas éstas, la Navidad es la fecha que más esperamos y donde más desenvolvemos con entusiasmo nuestro papel como diseñadores, instaladores y en ocasiones pintores o escultores.

Diseño
Se habla mucho de que El Vaticano ha decidido volver a instalar de nuevo el árbol navideño mexicano, donde participa el artesano tapatío Jesús Guerrero Santos. El árbol es uno de los objetos más representativos de las tradiciones cristianas (incluso adoptadas por otras culturas), que además tiene la virtud de practicarse en casi todo el orbe.

Por eso, cada país adopta su árbol según materiales de la región y eso le da una riqueza especial. Así, me parece motivo de orgullo que fuera de México se prefiera nuestra estética, fruto de una herencia mestiza que nos coloca en un lugar especial de la historia del arte. Además, en casa, cada uno de nosotros puede imponer el estilo propio o familiar para colocar esferas, foquitos y cuanto elemento se nos ocurra.

Instalaciones
Cuando niños, nos llama mucho la atención instalar el tradicional nacimiento. Esta costumbre nace como un método de evangelización que en México hizo raíces al grado de ser apropiado por artesanos y artistas. Hay nacimientos que rompen en molde y que gozan de piezas únicas o que, según las variantes, adquieren una personalidad. Cada quien se inventa una historia: que si los pastores pasan por este puente, hay una cascada y en el lago -hecho con un espejo- hay patos mientras se acercan los borregos a beber; los Reyes Magos vienen en camino y conforme se acercan los días, ellos se aproximan al portal donde se admiran José, María y el Niño Jesús. En fin, cada quien hace su instalación como prefiera.

Intervenciones
La ciudad es intervenida también. Cada gobierno decide imprimir su sello para colocar los adornos que podemos ver en las calles principales. Para cualquiera, ver Guadalajara de noche, sobre las avenidas 16 de Septiembre, Hidalgo y Juárez-Vallarta, es un deleite. De esta manera, el mensaje navideño nos llega con más fuerza a través del arte que producimos los ciudadanos comunes y bien vale la pena reconocerlo así.

Todos tenemos nuestro gusto y nuestra oportunidad de participar de la creación artística en estas fechas. Feliz Navidad.