El Madison Square Garden recibe a Juanes

NUEVA YORK, EU (10/ABR/2011).- Como en casa, y quizá mejor. Así se sintió Juanes en un concierto que arrancó el viernes por la noche y terminó rozando el sábado en Nueva York, ciudad a la que volvió tras un largo paréntesis y donde presentó su nuevo disco, P.A.R.C.E., además de volver a tocar sus viejos éxitos ante el entusiasmo del público.

El espectáculo, que se llevó a cabo en el Madison Square Garden, es parte de su P.A.R.C.E. World Tour, que arrancó en Seattle (Washington) en marzo pasado para dar a conocer los temas de su más reciente trabajo, del que ha dicho tiene un aire más de rock, sin olvidarse del amor, y que ya presentó con un pequeño concierto en diciembre en la Gran Manzana, una ciudad que asegura es muy especial para él.

“Esta es una noche muy especial para mí porque aquí hay una persona, Alicia, que es mi madre y  es la primera vez que viene a Nueva York”, afirmó emocionado Juan Esteban Aristizabal a sus incondicionales seguidores, quienes de inmediato lanzaron gritos de aprobación al artista.

Juanes, un artista que ha vendido 15 millones de copias de discos y que ha llamado la atención tanto de medios latinos como anglos, fue recibido por el público puesto de pie, gritos y en medio de un estruendoso aplauso que resonó en la gigantesca sala de espectáculos, donde ondearon toda la noche banderas de Colombia.

El intérprete, considerado por la revista Billboard como “El rey latino de las redes sociales” donde conversa continuamente con sus fans, dijo también estar acompañado en esta ocasión por su esposa, Karen Martínez, y sus hijos, al igual que por sus hermanos.

Durante la actual gira, el artista ha aprovechado una vez más la red social para mantener al público al tanto y agradecerles su apoyo.  “A todos y cada uno de mis fans, gracias por ser la inspiración, la razón y la fuerza de mi existencia”, señaló en Twitter, donde además indicó que “todo listo para el parcetour en España este verano” y no han faltado los señalamientos de tipo social, entre ellos sobre las víctimas de las minas antipersonales en Colombia.

Juanes tuvo como escenografía una gigantesca pantalla en la que se reflejaron las fotografías enviadas por muchos de sus seguidores, y un espectacular juego de luces.

Mostró así su gusto por las tecnologías y su reflejo en coloridas imágenes relacionadas con las canciones y con algunos efectos especiales, como en la despedida, en que se proyectó su rostro y se oyó su voz preguntando a los fans si todavía seguían allí. El público, más de 10 mil personas, cantó, bailó y desplegó banderas colombianas y carteles con mensajes como “Amamos a Juanes”.