EU revisa a la baja crecimiento para el primer trimestre

WASHINGTON, ESTADOS UNIDOS (30/MAY/2013).- El PIB de Estados Unidos creció 2.4 por ciento en el  primer trimestre, informó este jueves el Departamento de Comercio, que revisó  así a la baja su primera estimación del año, en 0.1 puntos porcentuales, en un contexto de recortes del gasto público que comienzan a notarse.

Esta segunda estimación arroja un resultado algo menor al pronosticado por los analistas, que situaban el crecimiento del PIB en 2.5 por ciento en proyección anual.

Sin embargo, reafirma que la mayor economía del mundo se mueve a un ritmo  que, aunque modesto, es mucho mejor al del cuarto trimestre de 2012, cuando el  PIB registró un alza del 0.4 por ciento, tras un tercer trimestre en alza de 3.1 por ciento.

El comunicado añadió sin embargo que "el panorama general de la actividad económica no se modificó realmente".

Los datos del primer trimestre continúan mostrando "una economía con fundamentos que se fortalecen, que está enfrentando importantes obstáculos  fiscales", dijo Ellen Zentner, de Nomura Securities International en relación a  los recortes del gasto público.

Los economistas han estimado que los recortes del gasto afectarán en medio punto porcentual el crecimiento del PIB para el año.  

Las medidas de austeridad para poner freno al déficit fiscal ya estaban en  curso en trimestres anteriores, pero aumentaron el 1° de enero cuando entró en  vigencia un plan para ahorrar 85 mil millones de dólares hasta setiembre.

Globalmente, el crecimiento de la economía fue impulsado por el consumo de  los hogares, que creció 3.4 por ciento en proyección anual en el trimestre (frente a 3.2 por ciento estimado anteriormente y sólo 1.8 por ciento en el cuarto trimestre del año pasado). Este rubro contribuyó en 2.4 puntos al crecimiento.

"Lo más alentador es que la revisión de este mes no borró la pequeña recuperación de los gastos en servicios, que subieron 3.15 en la comparación  trimestre a trimestre" y "el sector ha mostrado (así) su crecimiento más rápido desde el segundo trimestre de 2005", dijo Robert Brusca, de FAO Economics.

La persistencia de una tasa de desempleo elevada llevó a la Reserva Federal a inyectar dinero masivamente en la economía para intentar favorecer el crecimiento y la creación de empleos, generado preocupaciones por posibles desequilibrios financieros.

"El crecimiento de la economía no es lo suficientemente fuerte como para que los partidarios de la política monetaria ultraflexible (de tasas cercanas a cero e inyecciones de liquidez) se sientan cómodos para reducirla, incluso de manera modesta", dijo al respecto Joel Naroff, de Naroff Economic Advisors.

El Departamento de Comercio también informó que los consumidores disponen de menos ingresos luego de que el primero de enero expiró un recorte de impuestos que afectaba a los sueldos.

Los ingresos disponibles luego de impuestos cayeron 8.4 por ciento en el primer  trimestre, una cifra muy superior al 5.3 por ciento estimado inicialmente.

Los analistas se encuentran divididos en lo que refiere al crecimiento.

"En general, esta publicación no cambia nuestras expectativas de  crecimiento futuro", dijo Dean Maki, de Barclays Research.

El crecimiento del PIB en el segundo trimestre se enlentecería a 1.5 por ciento en  proyección anual, "en gran medida por la desaceleración esperada del crecimiento del consumo", agregó.

Nariman Behravesh, economista jefe de IHS Global Insight, advirtió que los recortes del gasto se sentirán más fuertemente en el trimestre actual.

De todas maneras, informó, IHS elevó su estimación de crecimiento para el segundo semestre a 1.5 a 1.6 por ciento, desde 1.4 por ciento.

"Las fuertes dinámicas del sector privado estadounidense apuntan hacia una  aceleración del crecimiento en la segunda mitad del año, con una tasa del 3.0 por ciento alcanzable para fin de año", agregó.