Martínez, listo para cerrar temporada en Plaza México

CIUDAD DE MÉXICO.- Para el diestro jalisciense Guillermo Martínez, lidiar en la Monumental Plaza de Toros México, además del enorme gusto, siempre representará una gran responsabilidad, y está listo y preparado para afrontarla este domingo.

El torero de Jalisco cerrará este domingo la Temporada Grande 2008-09 en el coso monumental al lado de los diestros mexicanos Federico Pizarro y Leopoldo Casasola, con ejemplares de la dehesa de Barralva.

Para llegar en las mejores condiciones físicas y mentales a este compromiso en la Plaza México, Guillermo Martínez se ha metido de lleno a las labores de tienta en diversas ganaderías, en las que afina detalles con la capa y muleta, y desde luego, con la espada.

Martínez estuvo en la ganadería de La Victoria, propiedad de Enrique Velázquez y ubicada en la ciudad de Coroneo, Guanajuato, donde practicó ante bravos ejemplares y afinó las variadas suertes que elabora con la capa y la pañosa.

La idea es que alcance su mejor nivel taurino para que pueda cerrar con broche de oro este serial mayor en el coso de Insurgentes el domingo, y así abrir nuevas puertas de otras plazas en la República Mexicana.

"Estoy listo para conseguir un gran resultado el domingo en la Plaza México, y así demostrar mis cualidades y mis deseos, y a la vez, agradecer a las personas que han confiado en mí para cerrar la temporada, es una gran responsabilidad y reto, pero también un gusto que acepto", afirmó.

El viernes, Martínez estará en otra ganadería para cerrar su preparación y viajar a esta capital para concentrarse el sábado y esperar el domingo, cuando hará el último paseíllo de la campaña mayor en la Plaza México.

Guillermo Martínez estará en su tercera tarde en este serial 2008-09, luego de las dos presentaciones que tuvo, el pasado 9 de noviembre en lo que fue el sexto festejo, y el 7 de diciembre anterior, en la corrida número 10.

En esa primera tarde, Martínez no pudo conseguir ningún trofeo, sin embargo, en su segundo festejo se llevó una merecida oreja, aunque después pasó de la luz a la sombra al escuchar los tres avisos de rigor y dejar ir vivo a su rival de la ganadería de Xajay.