GUADALAJARA, JALISCO (30/JUN/2017).- Candil de Concacaf, oscuridad en el mundo. Eso es México en el concierto futbolístico del planeta.Ayer dilapidaron una oportunidad de oro para mostrarse ante la elite del balompié. No fue sólo perder ante el equipo “B” de Alemania. No fue el quedarse con la incómoda jefatura de los germanos, a los que nunca han ganado en partido oficial. Fue el hecho de volver a ser sacudidos por una potencia.Ciertamente ahora no fue 7-0, pero sí 4-1 el marcador que le colgó Alemania al Tricolor, con lo que los germanos sellaron su pase a la Final de la Copa Confederaciones Rusia 2017.Apuntándose a la cabeza partido a partido con sus rotaciones y el manejo de sus laterales, Juan Carlos Osorio ahora sí jaló del gatillo.Primero, por la inexplicable decisión de sentar al motor de su ataque, Carlos Vela. Después, porque insistió con los centrales jugando de laterales. Oswaldo Alanís apareció por izquierda y por ahí se gestaron los dos primeros goles antes de los 10 minutos de acción. Para no quedarse atrás, Layún, quien jugó por derecha, también tuvo que ver en los otros dos tantos que redondearon la goleada.Después llegó el lapso más brillante del Tri en el torneo, pero apenas le alcanzó para fabricar dos jugadas claras. Y, como le suele pasar a los verdes, no supieron definir en el momento clave, antes de terminar el primer tiempo.En el complemento Alemania decidió no padecer más, adelantó líneas y dividió la tenencia del balón, que en la primera mitad fue abrumadoramente del Tricolor.Sobre la hora de juego marcaron el tercer tanto, por conducto de Werner, y entonces el entusiasmo de Osorio por buscar el empate, cuando eran dos goles la diferencia, se cambió por una decisión a la postre sabia, al ingresar a Rafael Márquez para evitar una goleada que pusiera en tela de juicio lo que la Femexfut había ratificado un día antes: su continuidad en el banquillo. La última media hora fue ver cómo el Tri se desgastaba buscando el gol que hiciera más decoroso el marcador. Mientras, Alemania era voraz al contragolpe al grado de que el VAR le perdonó un penalti a México.Cuando el juego agonizaba y los germanos pensaban en la Final ante Chile, Marco Fabián marcó el gol de la Copa Confederaciones. En respuesta, Alemania les hizo el cuarto.Ahora, Portugal, sin Cristiano, definirá si México merece el tercer lugar del torneo. Acaso la realidad del futbol azteca.
