Considerado uno de los mejores teatros líricos del mundo, a los 102 años de su inauguración, el Colón reabrió sus puertas en la noche del lunes, con el acto III del Lago de los Cisnes de Tchaikosvki, a cargo del Ballet estable del teatro y la Orquesta Filarmónica de Buenos Aires, y los actos I y II de La Boheme, de Giacomo Puccini, que fue responsabilidad de la Orquesta y el coro estables del teatro y el coro de Niños del Colón.Si bien no era el momento apropiado para juzgar con una lupa, el registro de la orquesta y el nivel de la danza que, por momentos, estuvo lejos de su nivel (tal vez fruto al conflicto gremial que afecta a los trabajadores del teatro con más de 200 despidos en los últimos días), lo que más importaba era saber cómo había quedado el teatro después de las obras. Vitreaux y boisseries renovados, paredes limpias, frescos restaurados al igual que paredes y aberturas, el escenario mejorado en su mecanismo y el telón nuevo, pasaron rápido el examen. El gran temor pasaba por saber cuánto había sufrido la acústica. Para la experta Pola Suárez Uturbey "no sufrió alteraciones"."Cuando, en el segundo acto de "la Boheme" escuché perfectamente la voz de un niño de 10 años que cantaba, él solito sobre un acorde orquestal: Vo´ la tromba, il cavallin ...! ya no me quedó la menor duda: el Teatro Colón afortunadamente sigue gozando de su sonoridad perfecta. Por lo menos esa es la opiniòn entre quienes no somos profesionales en el tema de la acústica".Brilló por su ausencia la presidente de la Nación, Cristina Kirchner, luego de una negativa asistir por su pelea con el Jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, quien sentó a su lado al vicepresidente, Julio Cobos y al presidente de Uruguay, José "Pepe" Mujica, quien fiel a su estilo desinhibido y popular cuestionó la decisión de su par argentina. "La cultura permite cosas que la pelotudez (la estupidez) de la política no permite".Así, con dilemas, conflictos sindicales y diferencias políticas, el Cólon volvió a brillar. Allí por donde pasaron, entre otros Arturo Toscanini, Enrico Caruso, Titta Rufo, Richard Strauss, Arthur Nikisch, Lily Pons, Igor Stravinsky, María Callas, Maia Plissetskaya, Mijail Baryshnikov, Plácido Domingo, Astor Piazzolla, el que vio nacer artísticamente a Julio Bocca , ahora espera la llegada de Daniel Bareboim, Zubin Metha y la orquesta de la Scala de Milán, según su director Pablo García Caffi.Después de tres años, de cierta incertidumbre, Argentina logró recuperar una de las obras de su patrimonio cultural más dilectas y apreciadas, con "su gran defecto", la sonoridad, intacto. El mundo de la lírica, da las gracias.