Shanghai se luce

SHANGHAI, CHINA (01/MAY/2010).- Todo comenzó el 3 de diciembre de 2002 en Mónaco. Aquel día se votó, entre cinco ciudades de igual número de países, cuál de ellas sería sede y por tanto celebraría la Exposición Universal de 2010. Y ese día ha llegado, ya que este primero de mayo, Día del Trabajo, comienza en la ciudad china de Shanghai la mayor Expo de la historia por número de participantes y tamaño.

La Expo de Shanghai tiene previsto recibir en sus seis meses de duración al menos 70 millones de visitantes, que recorrerán los pabellones de 189 países, entre ellos 22 sin relaciones diplomáticas con China, y 50 organizaciones internacionales. Entre las cifras récord para un evento de este tipo también está la de mayor inversión económica. El gobierno chino hizo públicos los números oficiales, que indican una inversión de cuatro mil 200 millones de dólares, cantidad que supone el doble del presupuesto destinado a los Juegos Olímpicos de Pekín 2008 y convierte a la de Shanghai en la Expo más cara de la historia.

Sin embargo, la propia prensa china, siempre afín y controlada por el régimen comunista, se permitió sugerir que el costo real asciende a una cifra cercana a los 58 millones de dólares. Así, entre otros conceptos, las autoridades de Shanghai han invertido 45 mil millones de dólares en mejorar las infraestructuras, como la red de metro, que se ha convertido en una de las más amplias del mundo, y la nueva terminal del aeropuerto de Hongqiao.

El presidente de China, Hu Jintao, fue el encargado de inaugurar anoche la muestra en una ceremonia que incluyó un abanico de danzas y canciones de todo el mundo, y culminó con fuegos artificiales en el río Huangpu, que atraviesa el recinto ferial.

El Centro de Actuaciones de la Expo, cuya forma recuerda a una almeja gigante, fue el lugar elegido para el acto de apertura, que sus organizadores habían prometido menos espectacular que la apertura de los Juegos Olímpicos de Pekín.

Un coro de cientos de jóvenes vestidas de rosa acompañó un tema interpretado por la cantante china Song Zuying y el famoso actor Jackie Chan, que dio el pistoletazo de salida al evento. A continuación, se procedió al izado de las banderas de China, de la Oficina Internacional de Exposiciones (BIE) y de la propia Expo, con sus respectivos himnos, seguidos de los discursos oficiales. Fue el momento entonces para que danzas y canciones de todos los continentes pasaran por el escenario, con las actuaciones estelares del pianista chino Lang Lang y del cantante italiano Andrea Bocelli.

Un hueco para las ciudades

Bajo el lema “Mejor ciudad, mejor vida”, el tema central de la Expo de Shanghai es “la vida urbana”. Una de las ciudades que más ha crecido en los últimos tiempos es, precisamente, la organizadora, por lo que tendrá mucho que enseñar.

Por primera vez, las ciudades pueden participar de forma directa sin necesidad de ir acompañadas por sus países de origen. Para ello se ha creado un espacio denominado ZMPU (Zona de Mejores Prácticas Urbanas), donde las ciudades que acudan a la exposición podrán mostrar sus propuestas para mejorar el desarrollo de las metrópolis.
No sólo por sus números la Expo de Shanghai está llamada a marcar época, también por ser la primera en convertirse en un evento virtual, ya que tendrá una réplica en internet, pensada para todos aquellos que no podrán visitarla.

Todos los países han llevado a Shanghai lo mejor de cada casa, conscientes de la importancia de China en los ámbitos económico, social y político.


Presencia de México

México está presente en la Exposición Universal de Shanghai con un pabellón de cuatro mil metros cuadrados de terreno que, con el subtema “Vivir mejor”, da cabida a su propuesta para encontrar soluciones sustentables a los principales retos urbanos y alberga un restaurante de alta cocina nacional, una tienda de artesanías y un área dedicada a la promoción turística del país.

Su apertura se llevará a cabo hoy, a las 12:00 horas, en la Zona C del recinto ferial con la asistencia de la secretaria de Turismo de México, Gloria Guevara; el gobernador de Jalisco, Emilio González Márquez; el embajador de México en China, Jorge Guajardo, y el comisario general de la República en la Expo, Eduardo Seldner.

El pabellón es la representación de un bosque formado por papalotes. El pasto natural manifiesta la inquietud de la recuperación de áreas verdes en las ciudades e invita a realizar diferentes actividades como leer un libro, hacer un picnic o simplemente descansar bajo la sombra. El papalote, por su parte, es un elemento de unión entre las culturas mexicana y china.

El dato

. En la muestra, de seis meses de duración, participan 189 países y 57 organizaciones internacionales; se prevé que asistan 70 millones de visitantes

. Está llamada a marcar época, porque se abre por primera vez las ciudades, que tienen pabellones propios


“La Exposición Universal de Shanghái pertenece al mundo”
Hu Jintao, presidente de China.