Músico resulta herido por fallas en sala de Ollin Yoliztli

CIUDAD DE MÉXICO (15/FEB/2015).- Un percance en la instalación eléctrica de la sala Silvestre Revueltas del Centro Cultural Ollin Yoliztli lastimó la mano del músico Kevin Tiboche, segundo oboe de la Orquesta Filarmónica de la Ciudad de México.

De acuerdo con personal de comunicación social de la Secretaría de Cultura del Distrito Federal y de músicos que presenciaron el percance, una lámpara explotó durante el ensayo del viernes y un fragmento cortó el dedo medio de la mano derecha del músico, quien fue trasladado al hospital Médica Sur, donde recibió una intervención quirúrgica.

Tiboche fue dado de alta y ya se encuentra en su casa, pero estará incapacitado por seis semanas y recibirá rehabilitación.

Este percance provocó que los conciertos y ensayos programados por la orquesta para este fin de semana en el recinto fueran cancelados.

Según la Secretaría de Cultura, Protección Civil hará una valoración de las instalaciones para evaluar la seguridad del recinto y hacer las recomendaciones necesarias para que pueda funcionar lo antes posible.
Prevén que la sala reabra sus puertas la próxima semana.

En redes sociales, algunos integrantes de la orquesta expresaron su indignación por este altercado y señalaron las malas condiciones en que se encuentran diversos espacios de este recinto cultural.

''Toda la sala se está cayendo a pedazos, en el estacionamiento de arriba se está tronando la loza, las autoridades dicen que no pueden darle mantenimiento porque no hay presupuesto, pero nosotros sí podemos trabajar así, y creo que eso está mal'', dijo a este diario Marcia Yount, integrante de la agrupación.

Comentó que una vez que las autoridades den a conocer el dictamen, los músicos harán un llamado de atención para que se atiendan las irregularidades en las instalaciones.

El Centro Cultural Ollin Yoliztli, la sede de seis escuelas artísticas de la ciudad de México, presenta graves daños en varios espacios, principalmente por las filtraciones de agua en los techos, por lo que cuando llueve hay que poner cubetas abajo de las goteras; las instalaciones eléctricas no han tenido atención desde los años 90, además hay pisos y paredes cuarteados.