Monroe y Dean reflexionan en el purgatorio sobre sus triunfos

CIUDAD DE MÉXICO (05/FEB/2013).- A la espera del cielo o el infierno, Marilyn Monroe y James Dean reflexionan en el Purgatorio sobre lo que fue su vida de estrellas, con el mundo a sus pies y hasta su repentina muerte.

En una lucha por definirse como los mejores, ambos personajes utilizan las palabras para lastimarse, para poner en duda sus éxitos o enaltecerlos, hasta que aparece "Toña Wendolyn Jazmín Sánchez y Treviño", una mexicana de barrio que los pone en su lugar.

Todo esto y más ocurre durante la puesta en escena "Que se quede el infinito sin estrellas", que bajo la dirección de Ignacio Flores de la Lama se estrenó la noche del lunes en el Foro La Gruta del Centro Cultural Helénico, con las actuaciones estelares de Daniela Zavala, Alberto Garmassi y Beatriz Moreno.

La historia analiza con ironía los mitos que se crearon en torno a estos símbolos sexuales, a estos iconos de la industria cinematográfica de Hollywood considerados como leyendas, que perdieron la vida muy jóvenes y en la cima del éxito.

Zavala y Garmassi, caracterizados como estos ídolos, se burlan de su condición de iconos del consumismo, generado por el capitalismo estadunidense, a través de la industria cinematográfica.

Sin embargo, los tintes mexicanos también salen a relucir en el Limbo cuando aparece en escena "La Toña" y la burocracia divina en plena sala de espera VIP.

Beatriz Moreno imprime el toque cómico al texto cuando relata su experiencia de vida vendiendo tamales y orgullosa de ser fan de Pedro Infante, al único que califica como una verdadera estrella, pues asegura: "A ustedes, Marilyn y James, ni quien los conozca".

Con este comentario provoca la ira y enojo de las leyendas, derivando así en una guerra de egos en la cual el público sale ganando al disfrutar del humor ácido que se deriva, pues los dos personajes estelares utilizan palabras en inglés para demostrar ante la intrusión de esta desconocida en su mundo que necesitan unirse para no perder su propia identidad.

Luego de su exitoso ciclo en el Café 22, la obra "Que se quede el infinito sin estrellas" se mantendrá vigente hasta el 25 de marzo en el Foro La Gruta, todos los lunes a las 20:30 horas.