México, en la cumbre del arte

MÉXICO.-Teresa Margolles participa en la cita italiana con la muestra ¿De qué otra cosa podríamos hablar?

La Bienal de Arte de Venecia celebra este domingo la inauguración oficial de su quincuagésima tercera edición, que bajo el título de "Fare mundi" ("Crear mundos") intenta mantener su atractivo tradicional en una muestra con amplia representación iberoamericana y en la que la pintura cede espacio a otras formas de representación artística.

Esta importante cita italiana, que se celebrará hasta el próximo 22 de noviembre, "ha sido la madre de todas las bienales" y en esta ocasión "pretendemos conservar el magnetismo" de estos más de 100 años de historia de la Bienal de Venecia, asegura su director, el sueco Daniel Birnbaum.

Lo que aquí podrá verse, añade, "son cosas nuevas, aunque en su concepto no sean del todo nuevas. Las obras se presentan en diálogo con este hermoso lugar", cuyo centro será el arte en sí mismo, "el mundo que han creado los artistas".

La quincuagésima edición de esta muestra que se organizó por primera vez en 1895 ofrecerá a expertos y a visitantes la posibilidad de contemplar la obra de los máximos representantes del arte contemporáneo de 77 países, en total, más de 90 artistas.

México se suma al universo artístico internacional con un espacio propio en la Bienal de Venecia. La artista Teresa Margolles (Culiacán, Sinaloa, 1963) es la protagonista del Pabellón de México instalado dentro del Palacio Rota Ivancich, cerca de la Plaza de San Marcos, con su muestra ¿De qué otra cosa podríamos hablar?

Ampliamente conocida en la escena artística nacional e internacional, la obra de Teresa Margolles ha sido objeto de las más diversas críticas y observaciones, calificando su propuesta entre mórbida, honesta, perturbadora, escalofriante, provocadora… Es una artista que ha destacado por su visión aguda ante los sucesos socio-políticos dentro de los lugares conflictivos de la República Mexicana, que pueden ir desde el índice de violencia en Ecatepec, resultado del narcomenudeo, hasta las ejecuciones de las muertas de Juárez.

En lo que a la muestra ¿De qué otra cosa podríamos hablar? se refiere, se concentra en pinturas y objetos, a partir de huellas materiales de asesinatos en las calles, así como reportes policiacos y noticias de la prensa. Se trata de una narrativa basada en tácticas de contaminación y acciones materiales que busca involucrar emocional e intelectualmente a los visitantes, sobre cómo la violencia y la economía global declaran a toda una generación de individuos y clases sociales como personas desechables, atrapadas entre la lógica de la delincuencia, el capitalismo y la prohibición.

La exposición de Teresa Margolles, curada por el crítico de arte y miembro del Instituto de Investigaciones Estéticas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) Cuauhtémoc Medina (Ciudad de México, 1965), estará acompañada por un catálogo bilingüe con textos de su autoría y de los escritores Ernesto Diezmartínez Guzmán y Élmer Mendoza, el investigador Luis Astorga, el filósofo español Antonio Escohotado, la artista y teórica mexicana Mariana Botey, y una entrevista a la propia Teresa Margolles.

Las obras presentadas en el Pabellón con que cuenta México en la Bienal de Venecia son, en palabras del curador de la exposición, "una crónica sutil de los efectos de una economía internacional diabólica: el círculo de la prohibición, adicción, acumulación, pobreza, odio y represión que ‘monstrifica’ los placeres transgresivos y obsesiones puritanas del norte hacia el sur".

Desde el punto de vista de Cuauhtémoc Medina, el trabajo actual de Teresa Margolles "aborda las consecuencias de algo más difícil de percibir: la información periodística de la violencia. Está hablando del mundo en el que en este momento, de una u otra manera, por efectos de lo que llaman el crimen organizado, guerra del narcotráfico o violencia de género y de clase, hay una generación entera, sobre todo en el norte del país, que está muriendo y con ella su potencial, los afectos que los rodean y un cierto espíritu".

Artista controvertida

Teresa Margolles fue una de las fundadoras del Servicio Médico Forense (Semefo) en 1990 y, desde entonces, ha realizado performances, instalaciones, objetos y videos, así como intervenciones en espacios públicos sobre el tema, usando sustancias corporales e imágenes de cadáveres.

Su exploración de la muerte se ha relacionado con una profunda investigación sobre los problemas económicos y políticos, la exploración social, el proceso de duelo histórico y la creciente violencia que define el entorno cultural y filosófico actual.

Aunque controvertido, el trabajo de Teresa Margolles ha sido expuesto en varias ocasiones y en diferentes sedes alrededor del mundo, incluyendo la Bienal de Liverpool 82006), la Kunstverein für die Rheinlande und Westfalen, Dusseldorf, Alemania 82007), la Colección Jumex, México (2007) y en Kunsthalle Krems, en Austria (2008). Ahora lo hará en Venecia.