GUADALAJARA, JALISCO (11/JUL/2017).- La obra de Luis Valsoto tiene una impronta única e inconfundible. Los perros, caballos y gatos que pueblan sus cuadros son apenas una representación plástica de la infancia del niño que se convirtió en pintor a golpe de pinceles. Valsoto, impulsor del grupo de Los Vitalistas, que hablaron de la vida, del hombre, de la mujer antes que dejarse influenciar por lo abstracto en su pintura, será parte de la exposición “Equinos 100”, que celebra el primer centenario de EL INFORMADOR.Las obras de Luis Valsoto que se incluyen en la muestra son los óleos sobre tela como “Circo”, del 2000; “Las Amazonas”, del año 2001; y “Caballo con pájaros”, óleo sobre madera pintado en el 2000.“Yo de niño mis vacaciones las pasaba en un pueblito llamado Santiago Papasquiaro, en Durango. Yo estuve en un internado, mi padre me puso en un internado durante la primaria y parte de la secundaria, entonces las vacaciones de diciembre, me mandaban a Santiago Papasquiaro, ahí tenían una casita donde veía caballos y animales, desde entonces se me metieron en el cerebro y ahora se me salen”, platica en entrevista el pintor.Siempre con una carga de melancolía por el tiempo que ya se fue, Valsoto vuelve sobre los caballos y las costumbres mexicanas: “De chiquillo me montaban en caballos de río y son muy mansos, después ya no tuve mucha relación con los caballos salvo en los recuerdos, y por eso empecé a pintar muchos caballos, afortunadamente a la gente le gustaron. Los caballos me representan la virilidad, la libertad y la belleza. Hice una serie sobre el circo y la sigo haciendo porque el circo me divierte, pero mi circo es de pueblo; antes los circos eran diferentes, ahora son muy electrónicos, antes eran de a de veras, veías al león y a los tigres. Toda mi pintura tiene nexos con la realidad, pero no es la realidad. Pongo caballos hincados, es más vacilón”. Los iniciosCon obra expuesta alrededor del mundo, y cuadros reconocidos en su propia ciudad, como “Homenaje a lo doméstico” que ganó el premio del Salón de Octubre en los años 80, los inicios de Luis Valsoto se remontan a su paso por California, donde comenzó su periplo como artista.“Estuve en Berkeley, California, prácticamente allá estudié en talleres el grabado y la pintura, iba a estudiar en la Universidad de Berkeley, pero no me admitieron porque era “espalda mojada”, pero me pagué talleres. Expuse en Galería de la Raza, eso en 1970. Una etapa en la que pintaba casi abstracto. Luego me regresé a Guadalajara porque ya tenía dos hijas chiquitas y empecé a pintar figurativo, toscón, inspirado en la escuela mexicana de alguna forma, pero ahora veo esos cuadros y sí me gustan, por eso los estoy retomando”.Sobre la influencia de la Escuela Mexicana Valsoto admite ciertos rasgos, pintores que le gustan, sin embargo, siempre marca una distancia, si bien es imposible no admirar a algunos artistas, su obra se mantiene con su estilo, único y ya reconocible por galeristas y público interesado. “A mí me gustaba mucho la obra de Rodríguez Lozano, El Corcito, María Izquierdo en cierta forma, muchos de la escuela mexicana. Aunque también me gustan pintores fuera de México: Francis Bacon, los clásicos como Modigliani; así se va uno alimentando. Tenemos una herencia magnífica para hacer buena pintura, no importa que no sea vanguardista”. Los pendientesCon exposiciones individuales en el Museo de Bellas Artes, en el Museo de Arte Moderno en México, en todos los espacios dedicados al arte en Jalisco, “hasta en Catedral”, Valsoto menciona que aún le interesa llegar a nuevos museos o volver a presentar obra en su tierra. Muestra especial interés en tener una exposición en el Museo de las Artes de Guadalajara, siempre y cuando los tiempos sean favorables. Menciona también que sus piezas suelen ser más apreciadas fuera del país.“Hace dos años expuse en Australia y la gente me compró toda la exposición; después el gobernador Ramírez Acuña se llevó gráfica mía, y de otros artistas, a Corea de Sur y les encantó; mis figuras llaman la atención a la gente ajena. Aquí casi no les gusta, prefieren a los extranjeros y el embarradero imitación de los gringos, el arte conceptual”.LA FRASE“Leía EL INFORMADOR porque ahí aparecían amigos míos, como Daniel Kent, que era dibujante, o el maestro Lara Gallardo o José Luis Meza Inda”.Luis Valsoto, artistaASISTE “Equinos 100”Exposición para celebrar el primer centenario de EL INFORMADOR, se inaugura el 3 de agosto a las 20:00 horas en el Patio Los Naranjos —concluye el 29 de octubre— en el Instituto Cultural Cabañas. Ocupará las salas 1, 2, 3 y 4.