Foster propone invertir en educación e infraestructuras ante crisis

MADRID, ESPAÑA (24/ENE/2012).-  El arquitecto Norman Foster aseguró hoy que en tiempos de crisis es cuando hay que invertir en educación y en infraestructuras, y recordó que algunas de las inversiones más importantes para las ciudades tuvieron lugar durante las épocas de depresión e incertidumbre económica.

Foster, uno de los máximos exponentes de la arquitectura de vanguardia y autor de más 300 proyectos construidos en los cinco continentes, se considera "todavía" un estudiante, y así lo dijo en la Universidad Politécnica de Madrid, de la que hoy ha sido investido doctor honoris causa.

En un encuentro con periodistas, el arquitecto británico, autor de proyectos tan emblemáticos como el aeropuerto de Pekín, la reconstrucción del World Trade Center de Nueva York o la ciudad de Masdar en Abu Dhabi, explicó que, más importante que los edificios que componen una ciudad, es la calidad de vida urbana.

"Vivimos en un edificio y vamos a otro edificio a trabajar o estudiar, pero no son en absoluto tan importantes como la forma en la que está diseñada la ciudad, que es lo que determina la calidad de vida" de los ciudadanos, insistió.

La adaptación del edificio a la forma de vida de sus habitantes o a la función para la que ha sido proyectado es algo fundamental para Foster, quien destacó la importancia de readaptar las instalaciones que se quedan obsoletas a otros usos, ya que en ello consiste la sostenibilidad.

Por eso, él apuesta por basar su arquitectura en la investigación, en satisfacer las necesidades humanas y cooperar a la sostenibilidad del planeta, porque está convencido de que "la calidad del diseño condiciona la calidad de vida".

Foster tiene en su haber, a lo largo de cuatro décadas de trayectoria profesional, más de 400 galardones y menciones especiales, como el Premio Pritzker o el Príncipe de Asturias de las Artes.

Pese a su larga trayectoria, Foster negó tajantemente que tenga proyecto de jubilarse: "Hago lo que hago porque me gusta hacerlo" explicó, para afirmar que no solo le gusta la arquitectura, sino que disfruta con otras muchas cosas como estar con su familia, pasear en bicicleta, leer o comer.