'El conservatorio de Europa' celebra su segundo centenario

PRAGA, REÚBLICA CHECA (03/MAY/2011).- Bohemia ha sido en ocasiones llamada "el conservatorio de Europa", y hace honor a ese calificativo el hecho de cobijar la escuela de música más antigua de Centroeuropa, que ahora celebra su segundo centenario.

Praga se precia de seguir con la Agrupación para el Perfeccionamiento de la Música en Bohemia los pasos de varios conservatorios italianos, sobre todo el de Nápoles, fundado en el siglo XVI, del Conservatorio Nacional Superior de Música de París, nacido en 1795, y de ser anterior al de Viena y Budapest.

La institución "ha tenido una influencia crucial en el desarrollo de la música aquí, y se puede equiparar al impacto de la Universidad Carolina en la cultura", ha afirmado su director, Pavel Trojan, que estudió composición en esta casa.

De aquí han salido directores de orquesta como Vaclav Talich -que dirigió luego la Filarmónica Checa en sus años dorados, cuando fue escaparate del régimen socialista y considerada "la niña mimada"-, Rafael Kubelik, Karel Ancerl o Jiri Belohlavek.

Es un ente de enseñanza secundaria que ha crecido de forma exponencial hasta alcanzar un alumnado de 550 estudiantes y un claustro de casi 200 profesores, que enseñan composición, dirección, piano, órgano, canto, instrumentos de cuerda, instrumentos de viento de madera, instrumentos de metal, percusión, acordeón y guitarra.

También se pueden cursar aquí especialidades de dramaturgia musical, música popular, correpetición instrumental, teoría musical especializada y asignaturas de pedagogía.

El momento más significativo de esta efemérides será la inauguración del festival "Primavera de Praga", el 12 de mayo, por la Orquesta Sinfónica del Conservatorio de Praga, que en 1815 fue la primera en tierras bohemias en interpretar la 9ª Sinfonía de Ludwig van Beethoven.

El Banco Nacional Checo ha acuñado con ocasión del 200 aniversario una moneda de 200 coronas y Correos ha emitido un sello conmemorativo, el primero de su historia dedicado al Conservatorio.

La ausencia de una Sinfónica en la metrópolis checa a principios del siglo XIX fue lo que llevó a ocho nobles de habla alemana a crear en 1810 la Agrupación para el Perfeccionamiento de la Música en Bohemia.

"En nuestras circunstancias, quizás de manera fortuita, surgió esta iniciativa de los nobles", recordó Trojan.

Así, varias familias de abolengo se unieron para asegurar durante casi cien años la financiación de un ente educativo inicialmente de cuño alemán, y en la que también colaboraban la Caja de Ahorros y el Ayuntamiento de Praga.

Poco después de nacer la agrupación, en abril de 1811, comenzó a funcionar el conservatorio, que estuvo durante años ubicado en el monasterio dominico de San Eguidio.

En 1885 se trasladó a la Casa de las Artes (Rudolfinum), junto al río Moldava, y aquí arranca la "época dorada" del conservatorio, dirigido entonces por Antonin Bennewitz y el célebre Antonin Dvorak.

Con la caída del imperio Austro-Húngaro, al final de la Primera Guerra Mundial, el conservatorio fue nacionalizado y la agrupación disuelta, ya que muchos nobles de habla alemana fueron considerados elementos monárquicos subversivos y poco afectos a la naciente República Checoslovaca.

Ahora, doscientos años después, la directiva del conservatorio solicitó a los sucesores de aquellos nobles cofundadores la restauración de la agrupación.

Hoy se encuentra presidida por la condesa Adrienne von Korff-Kerssenbrock.

"Organizamos actos representativos, nombramos miembros honoríficos, invitamos a conciertos y buscamos contactos", declaró a Efe la condesa Adrienne von Korff-Kerssenbrock,

Tras lograr un piano de cola Steinway Grand Concert de 140 mil euros (207 mil dólares) para la nueva sala de conciertos de la sede principal, "ahora el desafío es encontrar 480 mil euros (unos 710 mil dólares) para el órgano", apostilló la noble checo-alemana.