GUADALAJARA, JALISCO (23/SEP/2016).- El historiador mexicano José María Murià presentó la conferencia titulada “El centralismo y las revoluciones de México”, en la Cámara Nacional de Comercio de Guadalajara, en conjunto con el Instituto Cultural Ignacio Dávila Garibi. Al iniciar su participación en el auditorio del recinto, Murià apuntó que desde los años 80 del siglo pasado se acentúo la consciencia del centralismo en México, un “centralismo descarnado” como un obstáculo para el desarrollo, la armonía y el equilibro del país. Sin embargo, como desentrañó durante la lectura de su texto, el centralismo se remonta varios siglos atrás. Actualmente, apuntó, la administración pública se sigue rigiendo por un vértice que no toma en cuenta las diferencias del “colorido mosaico nacional”.Para ejemplificar de manera rápida, comentó la reciente reforma educativa, que parece “concebida para la colonia Narvarte, no para la pluralidad de nuestro país”. No es culpa de la variedad, pues “se puede ser mexicano de muy diferentes formas: todas válidas”. Incluso el federalismo no es homogéneo en su práctica, pues Murià puntualizó las diferentes relaciones políticas y sociales con las que las entidades mexicanas se relacionan con la capital nacional. Como ejemplo de la disparidad, comentó el municipio de Ensenada frente al de Atengo, en Jalisco. Una diferencia en los tamaños también se ve en los Estados mismos, como Tlaxcala frente a Baja California.De las relaciones entre las regiones y la capital, José María se remontó a la conquista misma, en donde los habitantes de las etnias indígenas tuvieron comportamientos muy diferentes según la zona: al sur, más numerosos, fueron también más sedentarios y relativamente sencillos de sumar a la Colonia; al Norte, con menos población y un tanto itinerantes, fueron más belicosos.Tras adentrarse en las condiciones sociales que activaron el ánimo independentista en el territorio ahora mexicano y las causas de la revolución, 100 años después, Murià señaló que son muchas las coincidencias con el presente, “¿quién sabe lo que nos depare el futuro?”, concluyó.PERFILUna vida dedicada al conocimientoJosé María Murià fue director del Colegio de Jalisco de 1991 al 2005, institución de la cual es maestro emérito; es miembro del Sistema Nacional de Investigadores, además de ser cronista general de Jalisco. Su libro “De la independencia a la revolución en Jalisco”, está a punto de ver la luz.