Chapultepec se llena de tinta jalisciense

GUADALAJARA, JALISCO (09/AGO/2014).- Los tatuajes se mantienen en el tabú social, dice Josué Castro, fotógrafo artístico que desde 2009 se dio a la tarea de retratar a las personas que han marcado su piel con tinta permanente.

Josué entiende a los tatuajes como una forma de identidad, un manifiesto eterno que conserva secretos, verdades y sueños sobre los ideales de la vida y su misión en ésta. A través de las fotografías, el artista visual originario de la Ciudad de México, intenta romper los mitos que rondan a los marcados con tinta por decisión propia.

Es por ello que inició ''Got Ink! (¿Estás rayado?)'', proyecto fotográfico que inmortaliza a cuanto tatuado se cruza en su recorrido por el mundo. Actualmente son más de 460 las imágenes que Castro guarda en su portafolio y ha montado en galerías y museos de Nueva York, Los Ángeles, San Diego y México.

Ahora toca el turno para la Galería Urbana de Paseo Chapultepec en Guadalajara. Serán 36 las imágenes que Josué Castro comparta a los tapatíos presumiendo a personajes jaliscienses que llevan tinta en su piel, ciudadanos de todo tipo de profesiones, edades y situaciones sociales.

El artista destaca que la intención no es promover el uso de tatuajes, sino una hacer un llamado a la expresión de igualdad y tolerancia, pues asegura que esta práctica milenaria aún es vista con discriminación y relacionada a actos delictivos o fuera de la norma social.

“La idea de la exposición es que sea una muestra ecléctica, porque tenemos profesionistas de todo tipo, desde maestras de preescolar, mecánicos, albañiles, bailarinas exóticas. No sabemos quién es la gente realmente. Te puedo ver con ropa y no saber que tienes tatuajes y eso cambia la perspectiva hacia tu persona, pero mal juzgas cuando sabes que alguien tomó la decisión de marcarse”.

En total son 175 jaliscienses tatuados a los que Castro ha retratado en diversos espacios, como la Expo Tatoo de 2013 que se celebra en esta ciudad, pero solamente 36 fotografías serán exhibidas como parte de la curaduría que Deborah Klochko, directora del Museo de Fotografía de San Diego (MoPA, por sus siglas en inglés), realizó para esta invitación de la Secretaría de Cultura tapatía.

Libre de estereotipos

Desde hace 15 años Josué Castro radica en San Diego, California, ciudad a la que llegó en busca de crecimiento profesional y en la que reafirmaría que el tabú hacia los tatuajes no cambia ni ahí ni en China.

“Todavía existe una problemática, porque la gente piensa que aquellos que tienen tatuajes son muy agresivos, que son personas malas. Es una situación que yo también tengo”, argumenta el creador visual al confesar que pese a su éxito artístico, los tatuajes que visten su piel han sido blanco de críticas y discriminación social.

Aunque su afición por los tatuajes se manifestó desde niño, no fue hasta los 35 años de edad cuando Castro sometió su piel a la tinta permanente por primera vez, al optar por una estrella que simboliza su influencia feminista y artística, pero que suele ser confundida con un pentagrama, figura relacionada a las sectas satánicas.

“Todavía existen muchos estigmas, te enfrentas a situaciones de rechazo, además de que soy moreno y mexicano. Cuando voy a determinados lugares me ven mal por tener tatuajes”.

Castro expresa una satisfacción total al saber que ''Got Ink!'' genera buena crítica cuando llega a los espectadores, y en especial cuando recintos culturales encuentran en su arte una forma de inclusión, igualdad y lucha contra la discriminación, además de una apreciación hacia su talento visual.

“Las imágenes son para que la gente las vea y se identifique, porque además, a los que aparecen en las fotografías se les da un respeto”.