Celebran Javier Aranda y Antonio Saborit los 50 años de 'Rayuela'

CIUDAD DE MÉXICO (18/MAY/2013).-  Para el  periodista por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), colaborador y fundador del periódico "La Jornada", Javier Aranda Luna, la constancia de Julio Cortázar quedó demostrada desde que comenzó a escribir, y así lo confirmaron sus primeros lectores, los de hace medio siglo.

"Es un autor vivo, vivísimo, al grado que los jóvenes de hoy, quienes no lo conocieron ni tuvieron el contacto que la prensa que hablaba de él en los años de esta publicación, se acercan a sus textos, particularmente a ´Rayuela´, y los siguen encontrando con una vigencia realmente asombrosa por su grandeza", refirió.

Asesor de canal 22, Coordinador Editorial de Noticieros Televisa, director y conductor del programa "Vuelta al aire", de la revista "Vuelta" dirigida por el Premio Nobel Octavio Paz, han sido algunos cargos y actividades de Aranda, autor de crónicas y reportajes publicados en diversos medios desde 1985.

"He asistido a numerosas ferias del libro, y un referente casi indispensable es Julio Cortázar", añadió el periodista y crítico literario tras asegurar que ese es un libro para armar, o interactivo como dicen los modernistas. "Este libro está vigente porque las grandes obras son así; las mediocres, se apagan pronto".

Aranda Luna reflexionó al evocar que su primer acercamiento a ese autor fue precisamente a través de "Rayuela". Un amigo me dijo que era interesante y yo, estudiante de preparatoria, lo comencé a leer. Me atrapó y como las grandes obras cuando están bien construidas, su entramado me fue jalando", dijo.

Acto seguido, compró un ejemplar, "y cuando iba yo en el capítulo siete, cuando Cortázar inicia la descripción de la boca de la amada y comienza a recorrer sus labios, me atrapó para siempre", añadió finalmente el entrevistado, quien aún conserva esa vieja edición de "Rayuela".

Por otro lado, Antonio Saborit, historiador e investigador de la Dirección de Estudios Históricos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), dijo al respecto que es un cincuentenario que celebra en grande "porque se trata de una novela que disfruté inmensamente en mis años de adolescencia".

Integrante del Sistema Nacional de Investigadores desde 2001, y miembro del Consejo Técnico Consultivo del Instituto Nacional de Estudios Históricos de las Revoluciones Mexicanas desde 1995, Saborit agregó: "es un universo al que he vuelto en varias ocasiones y en ninguna de ellas me ha defraudado".

Filosofó al señalar que "la palabra catedral es errónea, pero la uso ahora para ´bocetear´ la inmensidad de ´Rayuela´. La amplitud del espacio que nos ofrece como lectores para deambular en el interior de sus capítulos con esa singular propuesta que hace Cortázar, permite a cada cual trazar su propio recorrido".

El entrevistado recordó que cursaba la escuela preparatoria cuando leyó ese libro. "Era un periodo vacacional. Compré mi ejemplar, un libro gordo, de pasta negra, de la Editorial Latinoamericana en papel frágil y de baja calidad, que contrastaba espléndidamente con la plenitud prosística de Cortázar".

Además de conservar en su librero más preciado ese ejemplar, Saborit ha ido comprando nuevas ediciones, al grado que hoy tiene una buena cantidad de ellas. "Tengo las obras completas de Cortázar, tal y como las ha ido publicando en España el Círculo de Lectores", rubricó el historiador de fama mundial.