Aunque Jalisco es la segunda Entidad del país con más empresas apoyadas mediante el Programa de Estímulos a la Innovación (PEI) entre 2009 y 2017, durante los años 2016 y 2017 los recursos disminuyeron hasta en dos terceras partes.Mientras que hace tres años se apoyó a 67 proyectos de empresas radicadas en Jalisco, con un monto de 598.7 millones de pesos (314.9 millones del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, Conacyt), en 2017 fueron sólo 25, con un recurso de 217.28 millones (la mitad de ese recurso fue otorgado por el Consejo).En términos porcentuales, esto significó una reducción de 63.7% en el monto total invertido en la innovación de las empresas, y 64.8% en el monto público invertido; es decir, en los recursos con los que el Conacyt apoyó las innovaciones del sector privado.“Un talón de Aquiles es que la mayoría de las empresas no innova y el único camino para hacer desarrollo económico y social es, precisamente, a través de innovación y desarrollo tecnológico”, señaló Jaime Reyes, ex secretario estatal de Innovación, Ciencia y Tecnología, durante la presentación oficial de resultados del PEI 2009-2017.El Programa consiste en apoyos para empresas que impulsan proyectos de innovación que buscan crear nuevos productos, optimizar sus procesos y mejorar servicios. Opera en todo el país y el Conacyt apoya con entre 30% y 35% del costo total del proyecto. En la última década, y hasta el cierre de 2017, 397 empresas jaliscienses invirtieron cinco mil 355 millones de pesos en proyectos de innovación y desarrollo. El PEI del Conacyt les incentivó con dos mil 213 millones de pesos; es decir, cuatro de cada 10 pesos que dichas firmas invirtieron en investigación y desarrollo provinieron de las arcas públicas.Una de las tres modalidades del Programa de Estímulos a la Innovación (PEI) del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnologia (Conacyt), que se conoce como Innovación Tecnológica para las grandes empresas (Innovatec), se quedó sin recurso alguno en el Presupuesto 2019 de la Federación. El programa ya agonizaba, pues en 2018 recibió apenas 14 millones de pesos.El estatus actual significará una reducción en la innovación de las grandes empresas, como es el caso de Mieles Campos Azules, cuyos proyectos apoyados por el Conacyt, enfocados en la obtención de prebióticos derivados del agave para mejorar la flora intestinal, podrían venirse abajo ante la falta de recursos federales. “Estaríamos limitados a no poder investigar año con año, a no tener un proyecto bueno, firme y con flujo de inversión. Sería más lento el desarrollo de alto impacto”, señaló Dulce Alejandra Partida Vázquez, gerente de investigación y Desarrollo de Mieles Campos Azules.En contraparte, las otras dos modalidades del PEI continúan en pie. El programa Proyectos en Red Orientados a la Innovación (Proinnova), obien, los proyectos de innovación empresarial vinculados con al menos dos Instituciones de Educación Superior o Centro e Instituto de Investigación Pública, tendrá un recurso total de 71.4 millones de pesos; aumentó 17.2% respecto al año anterior.Además, el programa Innovación Tecnológica para las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (Innovapyme), tendrá un presupuesto de 28.5 millones de pesos, un un monto apenas superior a los 25 millones que se invirtieron en 2018. Durante la duración del programa Innovatec para las grandes empresas, las compañías de Jalisco recibieron desde 2009 un total de 766 millones de pesos, que se invirtieron en 87 proyectos, generando un monto total de inversión en innovación de dos mil 897 millones de pesos. Continental Automotive Guadalajara fue la compañía que más recibió apoyo de este programa; recibió recursos en años consecutivos desde 2009 a 2014. Las empresas Alimentos Finos de Occidente, Flextronics, IBM de México, Laboratorios Pisa, Intel Tecnología de México y Productos Maver recibieron recursos hasta en cinco ocasiones cada una.Jaime Reyes, ex secretario de Innovación en Jalisco, consideró que el PEI le permitió a la Entidad escalar del séptimo al segundo lugar en patentes, y además promovió la importancia de crear desarrollo industrial en las empresas locales. “Tenemos que conservarlo, impulsarlo y dotarlo de mayores recursos para el próximo sexenio. Sería un error que no continúe”, pidió.Creada en 2010, la empresa jalisciense Mieles Campos Azules es uno de los casos de éxito más destacados en el desarrollo de investigación científica dentro del sector privado estatal, gracias al apoyo de los recursos públicos del PEI. La compañía, especializada en la manufactura de derivados de agave (especialmente en jarabe que sirve como endulzante natural y orgánico), ha invertido 10 millones 158 mil pesos en dos proyectos de su área de investigación científica, de los cuales cuatro millones 112 mil pesos fueron recurso del Conacyt.El primero de esos proyectos, respaldado en 2016, se enfocó en el proceso de producción de fructanos de agave: un derivado con propiedades benéficas para la salud humana, especialmente en el trato de enfermedades digestivas como un prebiótico. “Entre sus beneficios regula la flora intestinal, como mejora digestiva, y también sirve para reducir de peso. Al consumirlo se ingiere un poco de menos alimento porque da un sentimiento de saciedad, porque el alimento les está haciendo mayor bien y aprovechan todos sus nutrientes”, señaló Dulce Partida Vázquez, gerente de Investigación y Desarrollo de Mieles Campos Azules. El propósito de la compañía, dijo, es lanzar productos farmacéuticos y suplementos alimenticios basados en el fructano de agave para su comercialización, y ampliarlo hacia las personas con problemas de sobrepeso y obesidad.Este último objetivo es el proyecto específico con el que Mieles Campos Azules recibió por segunda vez el apoyo del PEI en 2018, y busca lanzar un producto que ayuda a estas personas a bajar de peso, utilizando el derivado de fructano de agave como un complemento dietético.La empresa ha contado con el apoyo de la Facultad de Estudios Superiores Cuautitlán de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y el Centro de Investigación y Asistencia en Tecnología y Diseño del Estado de Jalisco (CIATEJ).“Aunque sólo somos tres personas del departamento, el apoyo de Conacyt sí ha estimulado la investigación y la creación de nuevos productos, y es muy importante lo que hace con la vinculación con las universidades y centros de investigación, eso le da más respaldo a nuestra investigación para darle buen rumbo y curso a los resultados”, indicó Partida.Para obtener mayor información sobre el programa, envíe un correo electrónico a la dirección: estimuloalainnovacio@conacyt.mx
