A ocho meses del cambio de administración, el Gobierno federal no cuenta con estrategias para la vinculación de personas con discapacidad en el ámbito laboral.Vía Transparencia, el Consejo Nacional para el Desarrollo y la Inclusión de las Personas con Discapacidad (Conadis) contesta que no existen lineamientos al respecto en el Plan Nacional de Desarrollo 2019-2024, por lo que “no han sido definidos los objetivos o programas para incluir a las personas con discapacidad en el mercado laboral durante 2019”.Mientras no hay programas especiales, el Conadis tampoco cuenta con director ni encargado de despacho.El Consejo agrega que en 2014 se lanzó el Programa Nacional de Empleo para Personas con Discapacidad, que se coordinó a través de las estrategias Abriendo Espacios, la Red Nacional de Vinculación y las Ferias de Empleo. Mediante esas acciones, en los últimos cinco años se consiguieron empleos para 43 mil 854 personas en esta situación de vulnerabilidad.El Artículo 11 de la Ley General para la Inclusión de las Personas con Discapacidad describe que se promoverá el derecho al trabajo y empleo “en igualdad de oportunidades y equidad”.En contraparte, la Federación lanzó un programa para otorgar un subsidio económico por dos mil 550 pesos bimestrales a las personas con discapacidad en el país. Aunque la meta es atender a un millón de ciudadanos, en México hay 7.6 millones de personas en esta condición.La última Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica indica que Nayarit es la Entidad con la tasa más alta de este sector: 82 personas con discapacidad por cada mil habitantes. Le sigue Durango, con 75, y después los estados de Jalisco, Colima, y Zacatecas, con 74 cada uno.A nivel nacional, Jalisco presenta el porcentaje más alto de personas con discapacidad para caminar, subir o bajar usando sus piernas, con 71 por ciento.Desde el Gobierno de Jalisco se trabaja en la elaboración de un padrón de competencias para la inserción laboral de personas con discapacidad. “Consiste en una serie de capacitaciones, herramientas digitales, así como una plataforma para que las empresas puedan estar bajando insumos, subir reportes y ubicar vacantes”, confirma Rodolfo Torres, director de Inclusión a Personas con Discapacidad.En la primera fase pretenden abrir plazas en las diferentes secretarías estatales. Actualmente se construye un diagnóstico sobre cuántas personas laboran y en cuáles áreas. Después se incluirá a la iniciativa privada. El objetivo es realizar los ajustes finales para terminar el plan en la segunda mitad del año. “Hasta hace unos años se pensaba a las personas con discapacidad solamente para los perfiles más bajos, cuando hay gente que tiene maestría o doctorado. Es valioso que se les pueda dar una oportunidad acorde a sus perfiles”.Dice que tras la identificación de las problemáticas presentarán otras estrategias, como un plan enfocado en apoyar a cuidadores de personas con afectaciones severas. “Por ejemplo, aquella mamá o papá que están cuidando a un hijo con una edad considerable, y muchas veces estos cuidados requieren prácticamente todo el día”.Otro objetivo es orientar a las empresas para que implementen procesos de inclusión y accesibilidad, desde rampas o señalética, hasta protocolos de atención y comunicación. “La falta de oportunidades laborales es una problemática importante, lo mismo en oportunidades educativas, acceso a la salud y accesibilidad. Estos cuatro rubros son estratégicos para lograr una inclusión significativa y plena”.Agrega que se busca un acercamiento con el Gobierno federal, pero tras los recortes presupuestales no han consolidado la comunicación. “Por eso hemos comenzado este modelo, desde nuestras competencias estatales y de lo que hemos trabajado con las asociaciones”.El área de Transparencia del Servicio de Administración Tributaria (SAT) contesta que no tiene datos sobre cuántas empresas recibieron beneficios fiscales por emplear a personas con discapacidad entre los años 2013 y 2019.Una pareja presiona un botón de atención y José acude a tomarles su pedido. Están en la sala de espera de Cinépolis VIP Midtown en Guadalajara, donde el joven atiende a las personas que desean comprar alimentos y bebidas. Se mueve sin dificultad en su silla de ruedas.José Rodríguez Saldaña, de 27 años, es un ejemplo de servicio. Sus supervisores lo describen como una persona cálida, puntual, bromista y amable. Por ello, algunas personas prefieren que él los atienda.“Es muy bonito cuando el cliente te saluda de mano, se sabe tu nombre, te ubica… o detalles así. Unos clientes que venían de Andares llegaron a conocer el cine, y cuando supieron que estaba en Midtown, dijeron que mejor iban a venir aquí”.A José su trabajo le encanta. Relata que desde hace varios años pensaba en ese cine. Le llamó la atención porque veía que los empleados hacían equipo.“Aunque no veía personas con discapacidad, sólo personas convencionales, se notaba que se ayudaban. Por eso yo quería trabajar aquí desde hace muchos años. Cuando se hizo realidad, pensé que estaba soñando”.A los 14 años comenzó su vida laboral. Primero en una abarrotera ubicada a pocas cuadras de su casa. Luego estuvo en una agencia de seguros. Antes de conseguir este empleo, José buscó a varias empresas. Sin embargo, le contestaron que no tenían la infraestructura adecuada para que realizara sus funciones.Tras seis meses sin empleo, en diciembre pasado fue seleccionado para formar parte del nuevo equipo de Cinépolis. El apoyo de sus compañeros y supervisores es fundamental. Desde la entrevista de trabajo le preguntaron qué necesitaba para ejercer sus funciones.Acentúa que, aunque los accesos de la plaza son incluyentes, al principio apagaban los elevadores que están cerca del cine. Entonces el gerente regional habló con los encargados para resolver la situación. Además de eso, no hay otros inconvenientes físicos para que José pueda laborar. La única dificultad es el transporte público: aunque el tiempo de traslado entre su casa y el trabajo es de 40 minutos, menciona que sale con dos horas de anticipación, ya que no funcionan todas las rampas de los camiones.Cuenta que su meta es comprarse un carro y una casa. Para ello es fundamental la inclusión en los empleos. “Me he topado con muchas personas que les da gusto que uno salga adelante. Aquí tengo la oportunidad de ser líder en servicio. Quisiera decir que las personas con discapacidad no se den por vencidas. Si uno se ve con una limitación nunca hará nada. Cuando se ve más allá de uno mismo se puede lograr cualquier cosa”.Hace un mes, el Ayuntamiento de Guadalajara estrenó la Dirección de Inclusión y Atención a Personas con Discapacidad. Héctor Figueroa, titular del área, indica que realizan un diagnóstico que servirá de soporte para definir políticas claras sobre inclusión.Destaca que en el municipio hay 101 trabajadores con alguna discapacidad, los cuales se concentran principalmente en la Dirección de Movilidad y Transporte.“En Guadalajara trabajamos por los derechos… el asistencialismo lo dejamos un poco de lado. La vinculación va desde esa perspectiva, desde funcionarios que tenemos discapacidad y estamos incorporados a la parte laboral. Incorporarnos a la cadena productiva y ejercerlo como un derecho”.Puntualiza que lo importante en el tema es apostarle a la capacidad de las personas; es decir, que trabajen en lo que estudiaron o saben hacer.“En Comunicación Social hay una comunicóloga. No se tiene que encasillar a las personas con discapacidad en un sólo espacio, queremos hacer una inclusión total”.La apuesta es que los programas sociales también sean incluyentes. Por eso en el proyecto de mujeres emprendedoras pretenden que éstas puedan armar una cooperativa o iniciar un negocio.De acuerdo con Héctor Figueroa, Guadalajara tuvo un papel importante en la Cumbre Internacional de Ciudades Incluyentes, que se llevó a cabo en junio. “Vinieron expertos de diferentes países, quienes nos compartieron sus buenas prácticas. En Guadalajara estamos trabajando en ese seguimiento para que podamos implementar las mejores”.Otro objetivo es articular los diferentes esfuerzos y darle continuidad a las acciones emprendidas en gestiones pasadas, como el caso de empleados encargados del programa de Banquetas Libres, que contribuye para impulsar empatía por parte de la sociedad.Laura Gutiérrez terminó sus estudios con la ilusión de encontrar un trabajo en el ramo de la comunicación. Al buscar empleo se topó con el clásico “yo te llamo”. Además, tenía que escuchar otras frases como “eres muy talentosa, pero... no ves” o “quizá en otro momento, cuando tengamos un puesto para ti”. “La barrera principal es que la gente no conoce de qué manera podemos incluirnos en los equipos… las empresas piensan que es muy complicado contratarnos”.Fue entonces que Laura decidió usar las redes sociales para buscar a Ismael del Toro, presidente municipal de Guadalajara, quien la invitó a trabajar en su equipo desde que estaba como alcalde en Tlajomulco. Ahora labora en el área de Comunicación del Ayuntamiento .“Al principio me trataron como amiga, eso me ha permitido desarrollarme porque saben en lo que les puedo ayudar y en lo que no. Por ejemplo, yo no voy a tomar fotografías ni videos, eso sería incongruente, pero les puedo echar la mano con las cuestiones de los boletines o grabar enlaces. Y no es ninguna discriminación, simplemente aprovechar lo que yo puedo hacer”.Laura explica que ella utiliza un software de acceso libre, el cual le permite trabajar en la computadora. Indica que, a veces, el personal de Recursos Humanos no tiene conocimiento de que esos detalles no tienen costo para las empresas.Agrega que es importante que cada día existan más servidores públicos y empresarios empáticos. “Lo interesante es que se animen y lo hagan, eso habla de que cada día habrá más personas con discapacidad ejerciendo o haciendo un trabajo digno”.El presidente de Red Ciudadana, José de Jesús Rodríguez, considera que faltan políticas públicas integrales de los tres niveles de Gobierno para la inclusión de personas con discapacidad a la vida laboral. “En otros lados del mundo, incluso es un asunto que se reglamenta, para que personas con discapacidad puedan cubrir el perfil. También es la falta de visión de empresarios porque sólo se piensa en incrementar la productividad en bienes y servicios. Pero se ha encontrado que personas con discapacidad cuidan mucho sus empleos, son responsables y buenos compañeros”.Destaca que la importancia de tener una política pública integral radica en ampliar la visión en otros aspectos, como la mejora de infraestructura y movilidad. Recuerda que, por ejemplo, ocurrió que una empresa en El Salto contrató a personas con discapacidades. Sin embargo, como no había transporte público, tuvieron que renunciar.La directora de Inclusión de Zapopan, Karina González Diaque, anticipa que se trabaja para crear una plataforma para generar vínculos con empresas, principalmente para acercarse a las diferentes cámaras de comercio del Estado. “Nos parece importante porque muchas veces por falta de información, los ciudadanos no saben qué empresas son las que contratan. En Fomento al Empleo hacen estos filtros, por medio de colectivos, para que la gente se pueda ir acercando”.Explica que el sitio estará integrado al portal del Ayuntamiento y será incluyente para las personas con discapacidad visual. Una vez que lancen la página podrán conocer la demanda que existe en el municipio.La funcionaria subraya que hasta el pasado 15 de julio, 3% de las personas que tiene en la nómina presentan alguna discapacidad, las cuales laboran en diferentes direcciones.Entre las metas que tienen con el programa “Zapopan Ciudad Incluyente” están los temas de no violencia y no discriminación. Para ello capacitarán a todo el personal en cuestiones de discapacidad, migración o diversidad sexual.También proyectan realizar obras de infraestructura incluyente.Vía Transparencia se solicitó al resto de los municipios metropolitanos sobre la contratación de personas con discapacidad o proyectos de inclusión laboral. Tlaquepaque respondió que no contaba con programas especiales para incentivar la contratación, “ya que no hace distinción alguna en el proceso… esto en virtud de ser una administración incluyente”.Por su parte, Tlajomulco contestó que estaba en desarrollo un reglamento de inclusión social, que reglamentará en porcentaje las personas con discapacidad de la plantilla, “además de certificar al Gobierno de Tlajomulco bajo la norma 025 de igualdad laboral y no discriminación, que busca crear una política de inclusión en el Centro Administrativo”.Elia Marúm Espinosa (directora del Centro para la Calidad e Innovación de la Educación Superior de la UdeG).La académica de la Universidad de Guadalajara (UdeG) recalca que debe cambiar la manera en la que se percibe la vinculación de personas con discapacidad a los empleos.“Se ha visto como acto de beneficencia, no como un derecho. No se ve toda la riqueza productiva o social. Es parte de la cultura egoísta, de ‘yo soy primero’… de ego, de no gastar más dinero en hacer una rampa. Pero no es el progreso material lo que te lleva a la felicidad, sino el construir una sociedad de paz donde nos respetemos y convivamos de acuerdo con nuestras diferencias”.Considera que estos asuntos han cobrado relevancia por los acuerdos y obligaciones internacionales que se han firmado, más que los impulsados por la propia dinámica social y productiva del país.“Aunque existe un Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación y otras cuestiones de ley, en la práctica prevalecen formas altamente discriminatorias”.Una de las cuestiones que contribuyen a la discriminación tiene que ver con cuestiones como la infraestructura o el transporte público. Por ese motivo es fundamental impulsar políticas públicas al respecto.“La atención igualitaria a las personas con discapacidad es brindar las oportunidades que requieren, entendiendo su discapacidad, además de las posibilidades de transporte, trabajo y educación”.Agrega que es importante un cambio cultural, donde se entienda que el desempeño de una persona con discapacidad puede ser igual o hasta mejor que una persona sin discapacidad. “Al interactuar en un trabajo se enriquecen las habilidades y capacidades de los demás”.Fuente: Comisión de Política Gubernamental en Materia de Derechos Humanos.