De los más de 10 millones de adultos mayores de 65 años que viven en México, según la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares (ENIGH), 2.9 millones cuentan con ingresos por pensión contributiva (principalmente del Instituto Mexicano del Seguro Social) recibiendo mensualidades entre cinco mil 100 y seis mil 600 pesos mensuales.Sin embargo, este grupo representa apenas 31% de todos los adultos mayores del país, y mientras que un hombre recibe en promedio seis mil 602 pesos mensuales, una mujer cuenta con cinco mil 128 pesos.Los ingresos empeoran sustancialmente para los 4.7 millones de adultos mayores que reciben una pensión no contributiva (principalmente el Programa de Pensiones para Adultos Mayores o 65 y más), ya que en promedio reciben 600 pesos cada mes.Mientras que un anciano varón tiene 608 pesos mensuales, una mujer percibe 611 pesos, un monto superior a los 580 pesos al mes que el Gobierno federal destina a cada adulto mayor a través de su programa dependiente de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol).“Si bien la pensión representa un recurso monetario importante para los adultos mayores, aproximadamente el 63% de los mexicanos mayores de 65 años cuenta con ingresos complementarios. Las fuentes de ingreso más importantes son: el trabajo, las rentas y las transferencias de otros hogares”, señala la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar) en su estudio del cuarto trimestre del 2017, dentro del apartado “¿Cuántos y quiénes reciben una pensión en México?”.La Consar también concluyó en su estudio que apenas el 37% de adultos mayores, es decir, 1 de cada 3, depende únicamente de su pensión como fuente de ingresos.Además, el organismo encargado de velar por las Afores en México señaló que 45% de los adultos mayores de Jalisco recibe una pensión no contributiva (apoyo estatal o nacional a través de 65 y más).TELÓN DE FONDOEl Presidente electo de México, Andrés Manuel López Obrador, confirmó el pasado 15 de agosto que ocho millones y medio de adultos mayores recibirán mil 300 pesos de pensión cada uno.El programa, que se activará a partir del 1 de enero de 2019, le representará al Gobierno próximo una erogación de 120 mil millones de pesos anuales.Según López Obrador, la pensión será universal e incluirá también a beneficiados con pensiones de IMSS e ISSSTE. Así también lo anunció la titular de la futura Secretaría del Bienestar, María Luisa Albores.“El 1 de enero del año próximo los adultos mayores van a tener una pensión del doble de lo que reciben en la actualidad, en los 32 Estados”, indicó el futuro titular del Ejecutivo federal.Para el especialista en temas de seguridad social, Estanislao Solórzano, el apoyo de López Obrador es una mejora, aunque de ninguna manera definitiva.“El hecho de que sea un programa sexenal lo deja endeble, porque el presidente que se va dejó un modelo, y el que viene tendrá uno nuevo. Lo ideal es incorporarlo a un marco legal, no generar un programa institucional, en el que se incluya el derecho a recibir atención económica o pensión con una mejor cuantía”.Pese a que el monto de mil 300 pesos mensuales sigue siendo insuficiente para cubrir la canasta alimentaria urbana del Coneval, Solórzano lo considera mejor que el actual apoyo de la Sedesol, de 580 pesos al mes.“No se alcanza ni para satisfacer una necesidad completa, ni la del alimento, ni la del vestido, ni la del esparcimiento, mucho menos la de la salud”.La carencia de pensiones bien remuneradas, la precariedad y la falta de oportunidades laborales, así como apoyos gubernamentales que no alcanzan para la subsistencia diaria, son algunas de las razones de que 72.7% de los adultos mayores de 65 años en México (tres cuartas partes de la población) viva en la pobreza y la vulnerabilidad.De acuerdo con las estadísticas del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), apenas el 23.7% de los adultos mayores es “no pobre” o “no vulnerable”. En contraste, 34.6% de las personas vive en “pobreza moderada”, 27.3% tiene “ingresos vulnerables” y 7.9% enfrenta la vulnerabilidad “por carencias sociales”.Estanislao Solórzano, especialista en seguridad social de la Universidad Panamericana, asegura que la actual situación de precariedad vivida por muchos adultos mayores jubilados se agravará cuando la actual generación adulta entre a la vejez.“Cuando una persona de 30 o 35 años llegue a la tercera edad, con el diseño legal de la nueva Ley de Seguridad Social, sus mecanismos de ahorro, las Administradoras de Fondos para el Retiro (Afores) y los porcentajes de cuenta individual, se encontrará con una problemática muy importante, recibiendo pensiones equivalentes a un salario mínimo (diario)”.Aunque Jalisco ha avanzado en reducir el número de los adultos mayores sin seguridad social, al bajar de 171 mil personas (que representa 33.1% del total) en 2010 a 96 mil personas en 2016, apenas un tercio de los adultos mayores tiene una pensión o jubilación. Y, además, quienes no la tienen y reciben un apoyo económico reciben bajas remuneraciones.Por ejemplo, el programa de la Secretaría de Desarrollo e Integración Social de Jalisco (Sedis) para reducir la vulnerabilidad de los adultos mayores, que llega a aproximadamente 29 mil 500 ancianos, apenas equivale a mil 200 pesos mensuales.Por su parte, el Programa Pensión para Adultos Mayores (65 y más), de la Secretaría de Desarrollo Social del Gobierno federal, entrega montos por 580 pesos mensuales, muy inferior a los mil 492 pesos mensuales que cuesta la canasta alimentaria urbana del Coneval.“Apoyos como 65 y más se percibe en los receptores como un beneficio, al no haber más apoyos, y se termina agradeciendo la dádiva sin pasar por la mente el reclamar jurídicamente por el bajo monto que recibe”, señala Solórzano.No obstante, el Coneval reporta un ligero incremento de la población adulta mayor que no vive en situación de pobreza o vulnerabilidad, ya que en 2010 el porcentaje de ancianos mayores de 65 años en esta condición era de solo el 17.6 por ciento.Según la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), de los 293 mil 072 adultos mayores de 60 años con alguna ocupación en Jalisco, el 70.46% recibe remuneraciones inferiores a los tres salarios mínimos diarios, es decir, menos de 7 mil 950 pesos mensuales.Este segmento de la población mayor, vio reducido en un año más de seis mil empleos con sueldos entre tres y cinco salarios mínimos, y poco más de 18 mil puestos de trabajo que pagaban entre dos y tres salarios mínimos diarios (entre cinco mil 300 y ocho mil pesos al mes).Los adultos mayores desocupados, es decir, aquellos sin trabajo, pero también sin seguridad social, se incrementaron un 63%, al pasar de dos mil 473 a cuatro mil 040 personas en el trimestre de abril-junio de 2018.El académico Estanislao Solórzano considera que estas bajas percepciones se dan en empleos que se destinan a adultos mayores, por ejemplo, como empaquetador en un centro comercial.“Aunque históricamente hay programas de incentivos fiscales para que empresas contraten gente de la tercera edad, no han sido funcionales, y desde el punto de vista del trabajo decente, encontramos ciertos roles que parece que los adultos mayores reciben bien. Sin embargo, no son empleados de esas tiendas, con las prestaciones de ley. La Secretaría del Trabajo tanto federal como estatal no regulariza esa situación. Prefiere hacerse de la vista gorda y no hacer nada porque las empresas ya no permitirían el acceso al trabajo a los adultos mayores”.La situación del empleo empeora cuando el adulto mayor tiene un empleo subordinado o remunerado, en donde recibe un sueldo fijo por la parte de un empleador o un patrón, o trabajo formalizado. Ocho de cada 10 personas con más de 60 años no reciben más de tres salarios mínimos diarios de salario.Población ocupada de 60 años o másTotal: 999 mil 698 personas.Nivel de ingresosHasta un salario mínimo De 1 a 2 salarios mínimosDe 2 a 3 salarios mínimosFuente: Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo.Aunque la población pensionada de Jalisco, mayor de los 60 años, se ha incrementado hasta llegar a los 224 mil 521 jubilados en el segundo trimestre de 2018, este número representa apenas el 32% del total de los adultos mayores ubicados en la Población No Económicamente Activa (PNEA).De acuerdo con las estadísticas de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), los adultos mayores que forman parte de la PNEA son 702 mil 586, de los cuales 224 mil 521 reciben alguna pensión o jubilación tanto contributiva (IMSS, ISSSTE, Pemex) como no contributiva (Programa de Adultos Mayores).“No se están haciendo los mecanismos para lograr un crecimiento de las jubilaciones”, critica Estanislao Solórzano, doctor en derecho por la Universidad Panamericana. “Lejos de criticar al sistema de las Afores, lo están tratando de consolidar, lo están apoyando desde dinámicas de ahorro voluntario, pero ni eso alcanzará para tener más pensiones dignas”.Los pensionados en Jalisco representan un 12.79% de incremento respecto al segundo trimestre de 2017. Sin embargo, sigue representando apenas un tercio del total de los adultos mayores que están en la PNEA en la Entidad.Además, si se considera que existen casi un millón de adultos mayores de 60 años en Jalisco (incluyendo la Población Económicamente Activa, la Subocupada y la Desocupada), el porcentaje de jubilados de la tercera edad se reduce al 22.45%; es decir, una cuarta parte.De hecho, existen más adultos mayores que viven de las actividades domésticas (364 mil 775) que personas jubiladas o pensionadas. De este número, el 73.52% son mayores de 65 años de edad.La falta de pensiones remuneradoras en Jalisco ha ocasionado que 56 mil 302 personas de este sector, pese a no estar económicamente activos, se consideren disponibles para el trabajo, pero sin haberlo conseguido, ya sea por considerar que no tienen posibilidades de tener empleo o desalentados al considerar que no hay trabajo para ellos.“Al no ahorrar para el retiro, el adulto mayor quiere un empleo, pero llega en un momento en el que no hay trabajo para él. Vivimos en México una problemática de falta de acceso a un trabajo digno, formal y decente, aquel que tenga un patrón, beneficios y derechos”.GUÍAAdultos mayores en el EstadoEl titular de la Secretaría de Desarrollo e Integración Social (SEDIS), Daviel Trujillo Cuevas, confirma que suman 28 mil 561 jaliscienses los beneficiados con una pensión mensual de mil 200 pesos, registrados ante el Padrón Único de Beneficiarios del Gobierno estatal.“Tenemos el programa al 100%, y estamos entregando entre los días 28 y 29 de cada mes el beneficio en su tarjeta correspondiente. Además, tenemos 13 mil jefas de familia, dos mil 500 becas indígenas y mil 700 apoyos de Jalisco Incluyente”.El funcionario señala que, con el cambio de administración, la última mensualidad que le tocará pagar al actual Gobierno (diciembre) se adelantará a los últimos nueve días de noviembre.Añade que ya se entregaron 48 mil de un total de más de 55 mil bienevales para adultos mayores y personas con discapacidad, y el último día de entrega de estos beneficios para las personas de la tercera edad será el 29 de agosto.Según estadísticas de Sedis, se repartirán bienevales a 51 mil 189 adultos mayores de 65 años, y cuatro mil 688 personas con discapacidad.Ayer, el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) estatal entregó 13 reconocimientos a Adultos Mayores Distinguidos, dotando de 20 mil pesos a cada uno de los galardonados.Durante la premiación, el gobernador Aristóteles Sandoval se manifestó complacido por la puesta en marcha de organismos especializados en apoyar a la tercera edad, como el Instituto Jalisciense del Adulto Mayor (IJAM). Y confirmó que el 15 de septiembre inaugurará el Hospital Geriátrico, ubicado a un costado del Hospital General de Occidente.Los 13 ancianos premiados fueron: Refugio Madera (83 años), un profesor de matemáticas de Huejuqulla el Alto; Ofelia Gutiérrez (68 años), filántropa de Encarnación de Díaz; Rosendo Llamas (99 años), músico de Tepatitlán; Salvador Cárdenas (80 años), expresidente municipal de Tizapán El Alto; Ramiro Ramos (67 años), entrenador de futbol en La Barca; y Antonio de la Rosa (72 años), médico de Zapotlán El Grande.Los premiados restantes fueron Juan Sánchez (73 años), profesor de secundaria de Atengo; Ignacio García de Alba (74 años), expresidente municipal de La Huerta; Luis González (82 años), carpintero de Puerto Vallarta; José Manuel Hernández (65 años), dibujante y pintor de Tequila; Luis Rodríguez (89 años), músico de Acatlán; Ignacio García (66 años), escultor de Tlajomulco; y Rosa María Monroy (70 años), premiada por pertenecer a una institución pública de Gobierno.CLAVESPara castigar penalmente a quienes abandonen, maltraten o exploten laboralmente a personas mayores de 60 años, fue presentada una iniciativa de reforma al Código Penal, que propone una pena de tres a siete años de cárcel a quien incurra en esas conductas.Son las mismas penas que se aplican al delito de explotación e inducción a la mendicidad, ya contemplado en el Código.El diputado Salvador Álvarez García, autor de la propuesta, señaló que con la medida se pretende combatir la discriminación hacia los adultos mayores y que tengan una mejor calidad de vida.En la iniciativa se plantea que la pena se aplicará a las personas que, por cualquier medio, administre, induzca u obtenga un beneficio económico, a través de la explotación laboral de un menor, de una persona con discapacidad física o mental o mayores de 60 años, poniéndolo a trabajar en las calles, espacios públicos, recintos privados o cualquier espacio.El Artículo 172 del Código Penal contempla que el delito de explotación e inducción a la mendicidad, lo comete quien obligue o induzca a una persona a pedir dinero, cosas o valores explotando la caridad pública.La sanción aumentará al doble cuando el inculpado sea integrante de una asociación delictuosa, sin perjuicio de la pena que le corresponda por ese ilícito, o cuando a la víctima se le obligue a fingir ante la sociedad ser menesteroso, desvalido o indigente.Sigue: #DebateInformador¿El Gobierno debe incrementar el subsidio a la población mayor de 65 años?Participa en Twitter en el debate del día @informador