Los vecinos de un barrio de clase alta de Río de Janeiro fueron despertados el viernes por el hedor de toneladas de peces muertos podridos que flotaban en la laguna Rodrigo de Freitas.Los biólogos creen que el calor extremo provocado por el fenómeno climático ''El Niño' mató a los peces durante la noche y éstos flotaron hasta la orilla.La laguna, una atracción turística, fue sede de varios eventos en los Juegos Olímpicos de 2016.El Ministerio de Ambiente de Río dijo en un comunicado que está en alerta desde el jueves, cuando se registró una brusca caída del nivel de oxígeno en la laguna.El biólogo Mario Moscatelli, especialista en ecosistemas, dijo que inspecciona la laguna todos los años y está convencido de que el cambio climático es la causa del alza de la temperatura.OF