Ante el desafío de salud pública que significa el cáncer de mama, es importante enfatizar la importancia que tienen el tamizaje y el diagnóstico oportunos como factores clave para aumentar la tasa de supervivencia y mejorar la calidad de vida de las pacientes, detallan expertos en el tema.De acuerdo con el Observatorio Global del Cáncer (Globocan), en 2020 en México se registraron más de siete mil 900 muertes por cáncer de mama y 29 mil 929 nuevos casos de esta enfermedad, siendo considerada la primera causa de fallecimientos por tumores malignos por delante de los de próstata, tiroides, colon y cervicouterinos.“Muchas muertes por cáncer de mama pueden evitarse a través de un tamizaje y diagnóstico oportunos. La detección temprana mejora la supervivencia, disminuye la morbilidad y reduce el costo de la atención médica, lo cual tiene un impacto positivo en los sistemas de salud y en las familias. Si a esto sumamos acciones de promoción de la salud, daremos un gran paso”, dijo el doctor Jorge García Alemán, Líder de Asuntos Científicos Becton Dickinson (BD), en el marco de la conmemoración del Día Mundial de Lucha contra el Cáncer de Mama, que se conmemora este 19 de octubre.En este contexto, el experto en anatomía patológica recordó que el objetivo de la Iniciativa Mundial contra el Cáncer de Mama, de la Organización Mundial de la Salud (OMS), es reducir en un 2.,5% anual la mortalidad mundial por esa enfermedad, con lo cual entre 2020 y 2040 se evitarían 2.5 millones de muertes en el globo.“Para 2030 la OMS pretende evitar el 25% de las muertes por cáncer de mama entre las mujeres menores de 70 años, y para 2040 esa cifra sería del 40%. La clave está en hacer promoción de la salud para una detección precoz, el diagnóstico temprano y la gestión integral del cáncer de mama a partir de un equipo de salud multidisciplinario”, explicó.El cáncer de mama está relacionado con antecedentes familiares de la enfermedad, inicio temprano de la menstruación, aparición tardía de la menopausia, primer embarazo en edad madura, acortamiento de la lactancia materna y no tener hijos. También influye la terapia hormonal de reemplazo posterior a la menopausia, el consumo de alcohol en exceso, el tabaquismo, el sobrepeso, la obesidad y el sedentarismo.Puede manifestarse mediante un bulto en el seno o en la axila; alteraciones en el tamaño, forma o aspecto de la mama; formación de hoyuelos o depresiones, enrojecimiento, grietas u otra alteración en la piel; cambios de aspecto en el pezón o la areola, así como secreción anormal por el pezón.“El cáncer de mama es considerado el de mayor prevalencia en el mundo , pero puede ser curable si se detecta a tiempo. En estadios avanzados, cuando se ha diseminado a otros órganos, el pronóstico es menos optimista pues requiere tratamientos más intensivos, invasivos y costosos que representan un fuerte impacto para la salud pública, para las pacientes y para sus familias. De ahí la importancia de insistir en la detección y diagnóstico tempranos”, añadió el doctor García Alemán.La autoexploración mamaria es una forma de detección temprana. Hay que realizarla siete días después de la menstruación para identificar cualquier anormalidad en las mamas. También existe la exploración clínica por parte de personal de salud; se aconseja a partir de los 25 años o antes si se detecta algún cambio.Adicionalmente existen pruebas de imagen, como el ultrasonido y la mastografía. Esta última se recomienda cada dos años a partir de los 40 años, y hasta los 69. Su objetivo es identificar cambios anormales en el tejido de la mama.Añadió que el tratamiento del cáncer de mama puede ser eficaz, con probabilidades de supervivencia del 90% o más altas cuando la enfermedad se detecta de forma temprana y se trata de manera adecuada. El abordaje puede incluir cirugía, radioterapia y diversos medicamentos.En este Día Mundial de la Lucha contra el Cáncer de Mama, la BD hizo un llamado a seguir impulsando el mundo de la salud para lograr una detección temprana, un diagnóstico oportuno y un manejo integral del cáncer de mama.JM
