Si alguna vez te has preguntado cómo llueve en el resto del sistema solar, puede que te sorprenda leer que la lluvia en nuestro planeta es una bonita particularidad, a diferencia de las lluvias de ácido sulfúrico, zafiros o rubíes que caen de otros planetas y cuerpos celestes. Las investigaciones científicas acerca de las precipitaciones en otros planetas, han permitido comprender las atmósferas planetarias, así como explicar su origen y posible habitabilidad.Según información de National Geographic, los gigantes helados del sistema solar: Urano y Neptuno, presentan las condiciones atmosféricas adecuadas para que lluevan diamantes. La astrofísica Naomi Rowe-Gurney, explicó cómo la existencia de metano en estos planetas —el cual contiene carbono que, al ser aplastado por la presión se libera y comprime para formar las estructuras de los diamantes—.“Dentro del planeta, cuando hace mucho calor y es muy denso, estos diamantes se forman y acumulan, y luego se vuelven aún más pesados. Y eso significa que llueven en la atmósfera. Pero no es la lluvia lo que vemos aquí porque estas presiones son extremas, y nunca podrás llegar allí como ser humano. Entonces, incluso si estos diamantes existen, nunca podríamos ir y agarrarlos”,dijo la astrofísica en un podcast de la NASA.Fue en 2017 que gracias al experimento de investigadores del Laboratorio Nacional de Aceleradores SLAC en Estados Unidos, que los científicos pudieron simular las altísimas presiones y temperaturas de ambos planetas y notar cómo el metano se transformaba en diamantes muy pequeños en cuestión de nanosegundos. Ahora bien, hay unas pequeñas pero evidentes diferencias. En Neptuno la lluvia de diamantes sí podría ser una precipitación constante en las capas más profundas. Esto porque las temperaturas superan los 7 mil grados Kelvin —unidad de temperatura utilizada en los trabajos científicos—. Por otro lado, la "lluvia de diamantes" en Urano continúa siendo una hipótesis sólida pero que aún no ha sido respaldada en imágenes directas. Por el momento, la única nave espacial que ha visitado ambos planetas fue la Voyager 2 de la NASA, lanzada en el año de 1977 y la cual realizó sobrevuelos cercanos a la órbita de Urano en 1986 y a la de Neptuno en 1989. Mantente al día con las noticias, únete a nuestro canal de WhatsApp. AO