Un grupo de científicos realizó un nuevo mapa de la radiación que golpea a Europa, luna de Júpiter, para facilitar a los expertos el trabajo en la búsqueda de signos de habitabilidad y biofirmas.El mapeo, clave para futuras misiones, revela dónde y qué tan profundo deberán ir los científicos en la superficie de Europa, uno de los lugares más prometedores del Sistema Solar para buscar los ingredientes de vida.“Cuando examinamos materiales que han surgido del subsuelo ¿qué estamos mirando?, ¿Nos dice esto qué hay en el océano, o es esto lo que les sucedió a los materiales después de que se han irradiado?”, se cuestionó.Para el desarrollo del estudio, Nordheim y su equipo observaron de cerca los electrones que explotaron la superficie de la Luna, para ello usaron datos de sobrevuelos a Europa, hechos por la misión Galileo y mediciones electrónicas de la nave espacial Voyager 1 de la NASA.“Si queremos entender qué está sucediendo en la superficie de Europa y cómo se vincula con el océano debajo, tenemos que entender la radiación”, dijo el autor principal del estudio, Tom Nordheim.La investigación publicada en la revista "Nature Astronomy", expone que las dosis de radiación varían según la ubicación.La emisión más dura se da en zonas alrededor del ecuador y esta disminuye cerca de los polos, destacó la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio (NASA, por sus siglas en inglés).El documento también mide la profundidad de la radiación, la cual varía de 10 a 20 centímetros en zonas de mayor emisión, así como hasta menos de un centímetro de fondo en latitudes medias y altas, hacia los polos de la Luna.Así, los científicos en futuras misiones a Europa sabrán que tan hondo deben perforar, para encontrar cualquier biofirma que pueda ser preservada.AC