Cuando se cumplieron 50 años de la llegada del hombre a la Luna, Estados Unidos (EU) quiere que aquella gesta, por la que se impuso a la Unión Soviética, sirva de ejemplo y acicate para reafirmar su dominio en la nueva carrera espacial, con la llegada del hombre a Marte como objetivo.EU presume y celebra el hito logrado hace 50 años por Neil Armstrong y Buzz Aldrin, los primeros hombres en pasear por la Luna, en la que fue una dura derrota a los soviéticos que hasta entonces lideraban la carrera espacial gracias al Sputnik y Yuri Gagarin, el primer hombre en volar al espacio.El presidente Donald Trump se comprometió a tomar como ejemplo ese hito para iniciar una “nueva era de exploración” en la que ampliarán el “espíritu pionero” de EU a los “confines más lejanos del cosmos”.Para lograrlo, espera que la misión Artemisa lleve a un hombre y una mujer a la superficie lunar en 2024 como paso previo al “siguiente salto gigante”, la llegada a Marte con la que el país quiere restablecer su dominio y liderazgo en el espacio.Trump destacó que el éxito del Apolo 11 “fue una demostración espectacular de la destreza técnica y el liderazgo espacial” de Estados Unidos y “sirvió como un ejemplo perdurable de lo que se puede lograr”.