En México se tiene una incidencia estimada por las autoridades del sector Salud, de entre cinco y seis mil niños nuevos que contraen cáncer cada año, señaló Alberto Torres Durazo, presidente del Patronato de Casa de la Amistad.En entrevista, explicó que esta incidencia es atendida por los hospitales del sector Salud en 60 por ciento, aproximadamente, y el porcentaje restante de estos niños se atienden en hospitales privados o en nosocomios de otras instituciones como el ISSSTE, Pemex y empresas que tienen su propio servicio médico.En su caso, dijo, atienden a una tercera parte de esos niños, alrededor de mil niños cada año, por recomendación de los hospitales con los que tienen convenio, todos certificados por el sector Salud y que tienen la especialización de oncología pediátrica.De acuerdo con Torres Durazo, el tipo de cáncer más frecuente es la leucemia linfoblástica aguda, 50 por ciento de los niños sufren de esa enfermedad, mientras que el resto se trata de linfomas o tumores.El índice de sobrevida promedio general en el país de niños con cáncer es poco mayor a 50 por ciento, debido a que gran parte de esos niños ya llegan en nivel de cierto avance, pero que puede ser curable si se detecta a tiempo, abundó.Para Abigail Vargas Hernández, mamá de Nadil, niña con cáncer, enterarse de la enfermedad significó un dolor inimaginable y un cambio drástico en su vida, aunque como familia se han ido acoplando a esa situación para luchar por la vida de su hija.En el caso de Adrián Jesús Pérez, padre de Naomi, quien luego de 26 quimioterapias va recuperando su salud, recordó que en el Hospital Infantil de México “Federico Gómez” les dijeron que Naomi tenía un tumor maligno, sin esperanzas de vida, porque era etapa cuatro.En el hospital le platicaron que su hija necesitaba un buen tratamiento de largo tiempo y los médicos y la trabajadora social le recomendaron la Fundación Casa de la Amistad.Contó que hace casi nueve meses una doctora le dijo que a Naomi le avanzó el tumor y le invadió la cara, por lo que la enviaría a cuidados paliativos, sin embargo, el 19 de agosto le tomaron una resonancia magnética en la que se mostró que ya no había tumor, por lo que ahora tiene esperanza de vida.AC