Las células tumorales de las personas que padecen cáncer de mama se propagan más fácilmente durante la noche que en el día, según estudio. Este nuevo descubrimiento sobre el cáncer proporciona nueva información para el tratamiento y progresión de la enfermedad, así como una evolución en la forma de concebir la medicina, ya que en el pasado se creía que los tumores proliferaban células cancerígenas las 24 horas del día. La comunidad científica ha investigado durante décadas la correlación entre el ritmo cardiaco y el cáncer. Ahora, este nuevo estudio encontró que los tumores cancerígenos despiertan cuando los pacientes se encuentran descansando. De acuerdo con el coautor del estudio, Nicola Aceto, biólogo del cáncer del Instituto Federal de Tecnología de Zúrich de Suiza, se trata de un paso más en la compresión de la metástasis. La metástasis es un proceso en el cual las células cancerosas se separan del sitio donde se originaron y forman nuevos tumores en otras partes del cuerpo. El portal "Nature" señala que esto sucede gracias a que las células viajan a través de la sangre hacia otras ubicaciones. "El descubrimiento revela una fisiología humana básica que hasta ahora ha volado bajo el radar [...]", expresó Qing-Jun-Ming, cronólogo de la Universidad de Manchester del Reino Unido, a "Nature"."Nature" indicó que el Organismo Internacional de Investigación sobre el Cáncer agregó el ritmo circadiano ininterrumpido como un factor cancerígeno, ante ello, diversos estudios señalaron que las personas que trabajaban durante horarios nocturnos estaban más propensas a desarrollar cáncer de mama; sin embargo, los especialistas aún investigan al respecto. El ritmo circadiano tiene una influencia importante con respecto a los procesos del cuerpo, como el metabolismo y el horario de sueño. Este, a su vez, es controlado por genes que expresan moléculas específicas durante las 24 horas. En el caso del cáncer, los expertos creían que las células estaban tan desgastadas, que de igual forma se ajustaban a dicho factor, sin embargo, se percataron que esto no podría ser del todo cierto. Para el análisis, el equipo de científicos empleó ratones de laboratorio con tumores. Se percataron que los niveles de células cancerígenas variaban de acuerdo a la hora del día en el que se les había sustraído sangre. Posteriormente, el modelo fue reproducido en 30 pacientes con cáncer de mamá, a quienes se les recogió muestras de sangre en dos horarios, a las 4:00 am y a las 10:00 horas.Así, descubrieron que la mayoría de los niveles de células cancerígenas aparecieran en las muestras tomadas a las 4 de la mañana, con casi un 80% de ellas, cuando los pacientes dormían. Aceto expresó que uno de los aspectos más sorprendentes del estudio fue confirmar lo que venía sospechando desde hace tiempo, que los seres humanos desarrollaban más células cancerígenas durante la noche, lo que los diferenciaba a la forma de actuar del cáncer en ratones, que producían más células cancerígenas durante el día, pero ¿cómo llegaron a esta conclusión?Los especialistas injertaron tumores de cáncer de mama en los ratones y monitorearon su nivel de células las 24 horas. Debido a que los modelos animales se encuentran más activos durante las noches, a diferencia del día, en ocasiones llegaron a tener una concentración de células 88 veces más alta por la mañana, que cuando se encontraban descansando. Los médicos miden los niveles de CTC en la sangre, refiriere el portal, y se trata de una biopsia líquida que ayuda a diagnosticar el progreso del cáncer en un paciente. La información obtenida por los médicos muestra que el horario de la toma de niveles puede ser engañosa para los tratamientos.Hasta el momento, los científicos señalan que es necesario seguir en proceso de análisis para determinar los factores del por qué las células del cáncer en los humanos son más activas durante las noches. La comprensión de este nuevo estudio llevaría a un mejor tratamiento del cáncer, sin embargo, se trata de un proceso largo para el mundo de la medicina y la ciencia. Uno de los colaboradores del estudio advirtió que no se debe de pensar el descanso o el sueño como un enemigo para las personas que padecen cáncer de mama, ya que este aún no establece los horarios pertinentes de descanso, y se ha demostrado que quienes duermen en menor cantidad tienen un mayor riesgo de muerte. Además, el ritmo cardiaco, que es un factor importante, también lograría desencadenar una movilidad rápida del padecimiento."Simplemente, significa que las células prefieren una fase específica del ciclo de las 24 horas para entrar en el flujo de la sangre", concluyó. SE