La mayoría de las personas que contraen coronavirus COVID-19 presentan síntomas como pérdida del sentido del olfato y gusto, tos y fiebre u otras, más relacionadas con la variante ómicron. Sin embargo, para otros, las manifestaciones físicas y las secuelas tras superar el episodio de la enfermedad siguen causando molestias en el organismo que dificulta llevar su vida con normalidad.Aún luego de poco más de dos años de pandemia, muchos son los estudios que descubren nuevas manifestaciones físicas del contagio de COVID-19 y los resultados son cada vez más sorprendentes.Una investigación publicada en el American Journal of Emergency Medicine en 2021 reveló que varios pacientes de coronavirus padecían priapismo isquémico, es decir, una erección prolongada del pene que puede durar más de cuatro horas, que no está relacionada con la estimulación sexual, y que suele ser dolorosa.El estudio señalaba que la severidad en el padecimiento de COVID-19 podía afectar el aparato reproductor de los hombres.La investigación da cuenta de un caso en particular, un hombre mayor, de 69 años, estadounidense, con antecedente de obesidad y que presentó una semana de tos, congestión, disnea, anorexia y debilidad generalizada. Tras sus síntomas, ingresó a un hospital y fue intubado. A pesar del tratamiento con dexametasona por diez días y el suministro de oxígeno suplementario, el hombre empeoró en sus condiciones de salud y se inició ventilación mecánica mientras permanecía sedado. Luego de algunas horas, la enfermera que lo atendía notó una erección y aunque le fueron colocadas compresas de hielo, la erección de su pene persistió durante las siguientes tres horas "con rigidez de los cuerpos cavernosos y el glande flácido". Se consultó con los especialistas en urología, señala el informe, y le fue drenada la sangre. Después de las disposiciones médicas, el hombre no experimentó más complicaciones "tromboembólicas y el priapismo no volvió a ocurrir".Y aunque la investigación reportaba dicho caso, también aclaraba que no existía la suficiente evidencia científica para relacionar el COVID-19 con casos de priapismo isquémico y es necesaria una investigación más profunda al respecto.Según la Clínica Mayo, el priapismo es una erección prolongada y persistentea del pene y no es causada por la estimulación sexual, por lo que suele ser doloroso.El priapismo afecta más comúnmente a los hombres de 30 años en adelante.Los síntomas del priapismo dependen de uno de los dos tipos que existen:El priapismo isquémico se produce cuando la sangre queda atrapada en el pene. Es el tipo más frecuente de priapismo. Algunos de los signos y síntomas son:Cuando el flujo sanguíneo del pene no está correctamente regulado es llamado priapismo no isquémico que, en general, suele ser menos doloroso que el priapismo isquémico. Los signos y síntomas incluyen los siguientes:OA
