Hoy vamos a visitar un paraíso terrenal. Uno donde la vista se pierde en la espesura de la sierra, las cañadas y riachuelos infinitos. Ese donde el verde se descompone en incontables matices. Espacio donde la naturaleza juega con un cincel divino por miles de años y cada día dibuja una obra sin prisa por terminarse. Hoy toca explorar a profundidad El Arcotete, Chiapas.Este rincón del cielo se encuentra 4 kilómetros al Oeste de San Cristóbal de las Casas, ciudad de encanto colonial que en años recientes ha descubierto una intensa vocación turística. El parque ecoturístico Arcotete, como otros tantos atractivos chiapanecos, apela a la belleza natural para atraer a los aventureros, amantes de la fotografía y quienes busquen un respiro a la interminable cacofonía citadina. Destino poco difundido en las usuales guías de viajero, pero imperdible para aquellos de alma bohemia y curiosa.El nombre se debe a un amplio arco de piedra por el que cruza el río Fogótico, en la región de los Altos de Chiapas. Rodeado por la exuberante selva, la formación rocosa destaca por su fino arco, sus estalactitas y formaciones rocosas internas -cavernas- talladas a lo largo de miles de años por la fuerza de la corriente. El murmullo de sus aguas y el ulular del viento son compañeros inseparables de quienes se aventuran a examinar esta belleza chiapaneca.Sin embargo, para los románticos, el génesis detrás de “Arcotete” se encuentra en una leyenda que se ha contado de generación en generación. La de un soldado francés llamado Jean Francoise D’Arcotete, quien rechazado por una bella mujer de San Cristóbal de las Casas, se quitó la vida ahogándose en el Fogótico. Su rostro afligido, dicen las leyendas, todavía se puede apreciar en una de las rocas internas del arco.En los alrededores hay mucho por descubrir. Cerca se encuentra levantada la bella Iglesia del Carmen (en la acuarela), parada obligada para los habitantes de la zona y turistas, en especial quienes gustan del ciclismo de aventura, quienes han encontrado en este lugar un punto de encuentro.La formación rocosa de Arcotete llega a tener una altura de 40 metros de alto, por lo que es una de las zonas preferidas de Chiapas para practicar la escalada deportiva. Además, desde lo alto del arco se puede practicar el rappel.Para aquellos que quieran vivir una experiencia llena de adrenalina, en el parque hay tirolesas, caminatas por las grutas del interior del Arcotete y paseo a caballo. Si tienes la sensación de que el día está pasando demasiado rápido, la buena noticia es que aquí hay servicio para acampar, baños y un restaurante con comida típica.Los ejidatarios de la zona son los encargados de vigilar el lugar y cuidar a los turistas. Ellos son los primeros interesados, ya que han convertido el ecoturismo en su principal fuente de ingresos.Toma caminoDesde San Cristóbal de las Casas toma la carretera a Tenejapa, después de 4 kilómetros hay una desviación, da vuelta a mano derecha y luego de un kilómetro encontrarás el estacionamiento de El Arcotete. SA
