Espacio donde se gesta la poesía y se cosechan los versos. Al que llega el viajero curioso y parte un enamorado de la aventura. Palabras sencillas pero que definen a la perfección el encanto del Hotel Boutique Casa Bugambilias, sublime rincón construido en el Pueblo Mágico de Calvillo (Aguascalientes).Con una oferta hotelera cada vez más sofisticada y propuestas que luchan por ser diferentes una de las otras (no siempre con éxito), Casa Bugambilias se presenta como una bocanada de aire fresco en una de las zonas turísticas con mayor potencial de crecimiento de nuestro país: el Valle de Huajucar, favorito para los turistas que gustan de la naturaleza, el contacto con la cultura popular o sencillamente andan detrás de una zona tranquila y alejada de las grandes ciudades.Pero que no esté en una ciudad no se traduce en que sea un hotel rústico. El recinto cuenta con siete habitaciones, y cada una ofrece una experiencia sensorial diferente, en espacio y decorado. El ADN de Bugambilias bebe directo de la cultura mexicana de los siglos XIX y XX, misma que se palpa en los colores, muebles y detalles de cada habitación.¿Qué tan a pecho se toma sus raíces el hotel? Basta con ver el nombre de sus habitaciones: Frida, Chavela, María Bonita, Mamá Lilia, Micaela, Doña Angélica (en la foto) y Nana Pancha, cada una con características especiales y un decorado exquisito hasta el detalle más pequeño.Las habitaciones enamoran, pero el recinto tiene mucho más para mimar a sus huéspedes. Entre las amenidades que encontramos está el temazcal (tradicional baño de piedra, perfecto para desintoxicar la piel y aclarar la mente), spa (con diferentes tratamientos y masajes según la necesidad de los clientes), alberca y jacuzzi exterior (con una excelente vista).Hablando de vista, vale la pena regodearse en la fachada del hotel. Trabajada en cantera (clásico de esta región del país), plena en detalles y rodeado por una vegetación que se mantiene verde todo el año, vale la pena tomarse unos minutos para observar las esculturas, macetones y hasta el columpio de los sueños que tiene en el exterior.Mención aparte se merece la oferta gastronómica del hotel, con su restaurante Rosa Mexicano. Como el nombre lo indica, el menú está compuesto por la rica gastronomía de nuestro país, con una presencia dominante de recetas hidrocálidas e ingredientes de Calvillo (imposible no probar el excelso postre de guayaba). La carta fue articulada por el chef Sergio Loera Pérez, que combina su conocimiento en la cocina internacional (particularmente la francesa), para ofrecer una serie de platillos de calidad memorable.VIVE UNA EXPERIENCIA FABULOSAPide más información
