Algunos la llaman la “Ciudad de los diamantes”, en recuerdo de aquellos tiempos en el siglo XVI en los que su puerto veía ir y venir las riquezas de todo el mundo. Otros no olvidan que fue la cuna de artistas que alcanzaron la inmortalidad mediante su obra pictórica, como Peter Paul Rubens y Anthony Van Dick. Quizás la mejor palabra para definir hoy a la ciudad de Amberes es “Asombrosa”.Diversa y vibrante, Amberes ha definido el horizonte de Bélgica (y del Norte de Europa) durante siglos, gracias a su músculo comercial y a la genialidad de sus artistas, pero lo cierto es que en años recientes ha encontrado un nuevo nicho en el turismo. Son miles los viajeros que llegan cada año a su puerto, maravillados por su arquitectura, donde se abrazan estilos que van de lo medieval a lo moderno.Comencemos por explorar su Centro histórico, con su Plaza del Mercado (Grote Markt), desde la cual podemos disfrutar de sus edificios más tradicionales. En su corazón se encuentra la “Fuente del Brabo”, llamada así en honor a un capitán romano, llamado Brabo, quien según la leyenda, le cortó la mano a un mítico gigante y la lanzó al río Escalda. De hecho, la etimología de Amberes viene del neerlandés “Ant” (mano) y “werpen” (lanzamiento).Desde el Grote Markt es posible disfrutar también del hermoso Ayuntamiento, con fachada renacentista. Es una zona muy turística, gracias a todos los restaurantes y cafés que la bordean, además de que aquí se suele montar el mercado navideño cada año y una pista de hielo durante el invierno.No todo en Amberes se remonta al pasado. Hoy es un puert o vibrante, y basta con darnos una vuelta por su llamado “Barrio de la moda”, como se conoce a St. Andries, pues aquí se encuentran las boutiques de vanguardia y también el ModeNatie (museo de la moda).Siguiendo el margen del Escalda, nos toparemos con el Het Steen, un castillo de pequeñas dimensiones construido en el siglo XIII. Ahora se encuentra en proceso de restauración, aunque se espera que para el 2020 ya esté abierto de nuevo al público.Es imposible no recomendarte visitar el Museo Plantin-Moretus, que alberga una imprenta del siglo XVI y cuenta con una enorme biblioteca de valor incalculable (y claro, una tienda de souvenirs fabulosa). Otro imperdible es el Museo Real de Bellas Artes, con obras de los grandes maestros belgas.Bélgica es un país famoso por su deliciosa cerveza, y por si existe alguna duda, en Amberes se encuentra una de las mejores cervecerías del Viejo Continente: La Bier Central.Se encuentra en la calle de Keyserlei 25 y abre desde las 10:00 horas. ¿Razones para ir? Su carta supera las 300 cervezas y su menú es en realidad una enciclopedia. No te preocupes, la carta también incluye comida, desde la más típica de Bélgica hasta hamburguesas para no extrañar el continente americano. Visita su página para descubrir más: www.biercentral.be/english.¡A volar!Líneas como Aeroméxico ofrecen el vuelo desde Ciudad de México hasta Amberes, aunque haciendo escala, usualmente en París. Recuerda que para encontrar mejores precios, siempre es buena idea adquirir tus boletos de viaje con mucha antelación.