El tapatío Alan Estrada no solo se ha realizado profesionalmente como actor, también ha encontrado en sus viajes por el mundo, otra manera de trascender en la vida, su perspectiva del mundo ha cambiado conforme conoce nuevas personas y nuevas culturas.“(Viajar) me ha cambiado todo, cada vez siento más que no sé nada, tengo más preguntas que respuestas, creo que vivimos en un mundo hermoso, y cuando vivimos en una burbujita, solemos juzgar, apuntar y señalar las diferencias cuando la realidad eso es lo que nos hace únicos”.Con 2.25 millones de seguidores en su canal de YouTube, “Alan por el mundo”, el actor, influencer y youtuber, ha generado una comunidad muy importante que sigue sus aventuras y que toma sus consejos y actividades para armar su itinerario.“Viajar me ha enseñado a respetar a quienes viven de forma distinta a mí, no hay mejor forma de abrazar la diversidad que viajando, te das cuenta cómo la gente podemos ser tan distinta, tener otro color de piel, amar de forma distinta, rezarle a otros dioses, pero en el fondo somos iguales y lo que me gusta a mí es que ese intercambio cultural que da viajar, no solo te permite descubrir cosas sobre otros países, también es ser un embajador de tu propio país”.Alan disfruta mucho de viajar solo, pero también le gusta la compañía de su familia y amigos, cada año organiza un viaje sorpresa con su familia, quienes siempre se enteran de a dónde van con una semana de anticipación, esta vez fue con ellos a Canadá. Sobre lo que carga esencialmente en la maleta dice, es la ropa interior y los básicos.“Ahora empaco de manera más relajada, porque sé que si algo se me olvida, lo puedo encontrar al lugar a donde voy, a veces investigo cosas que probablemente no pueda encontrar en el sitio donde estaré, por ejemplo, si estoy en un lugar muy inhóspito cuido más lo que empaco, pero creo que vivimos en unos tiempo donde podemos relajarnos mucho, porque las aerolíneas nos han obligado a empacar de una manera más ligera para no documentar”.Alan señala que a veces le es difícil dimensionar el impacto que sus contenidos tienen en los demás, “he conocido mucha gente que me cuenta historias que realmente me conmueven, nunca he querido tomarme el crédito al cien por ciento, porque hay una frase de Fernando Pessoa que dice que ‘los viajes son los viajeros, porque lo que vemos no es lo que vemos, sino lo que somos’. Entonces, siento que lo que esas personas ven en mí, es un reflejo de ellos mismos, porque en el fondo no nos conocemos, pero agradezco ser de utilidad, me genera una enorme responsabilidad”.