Este año se ha confirmado la continuidad de la prohibición en la venta de elotes durante la celebración del Grito de Independencia, una decisión que ha generado descontento entre la ciudadanía. A pesar de las explicaciones proporcionadas por las autoridades, numerosos ciudadanos aún no están conformes con la medida.Septiembre, conocido como “el mes más mexicano”, debería celebrarse con todos los elementos típicos de nuestras festividades. Entre estos se encuentran el pozole, las tostadas, los pambazos, las cervezas, el tequila y, por supuesto, los elotes. La reciente normativa que prohíbe su venta el 15 de septiembre ha provocado una gran polémica.La Secretaría de Protección y Auxilio Ciudadano de Cuernavaca, en el estado de Morelos, ha anunciado que la venta de elotes estará prohibida en el Zócalo de Cuernavaca durante el Grito de Independencia. Esta medida, que ya lleva varios años en vigor, ha captado la atención a nivel nacional debido a su singularidad. La razón detrás de esta prohibición radica en preocupaciones de seguridad. En ediciones anteriores del evento, se ha registrado que los elotes en palo han sido utilizados como proyectiles, poniendo en riesgo la integridad de los asistentes.Se dice que la restricción comenzó durante la administración de Jorge Carrillo Olea (1994 - 1998), cuando un elote lanzado durante el Grito de Independencia manchó el traje del entonces presidente. Aunque el incidente no causó daño físico, desde entonces se consideró al elote como un posible objeto de riesgo.Cabe destacar que esta medida no se aplicará en todo el país, sino únicamente en el Zócalo de Cuernavaca, donde se ha implementado durante varios años. Durante las festividades patrias, es común disfrutar de una variedad de antojitos como enchiladas, pambazos, quesadillas, tostadas, sopes, tlacoyos y otros derivados del maíz, incluidos los elotes y esquites. Sin embargo, la nueva directiva excluye los elotes de la venta en la próxima Noche Mexicana. A pesar de las justificaciones oficiales, muchos ciudadanos consideran que la prohibición atenta contra las tradiciones que enriquecen las celebraciones del mes patrio.BB