Emmett Soto Grave, alcalde de Escuinapa, Sinaloa, justificó que por su condición de médico internista que atiende en sus tiempos libres a pacientes contagiados de COVID-19 recibió la vacuna de Pfizer en el hospital general de su municipio, por lo que diputados lo quieren llevar a juicio político y ciudadanos piden su destitución.A raíz de que se conociera que el primer edil recibió una de las nueve mil 750 dosis que se enviaron la semana pasada a Sinaloa, se ordenó la sustitución del director del nosocomio donde se inmunizó, Wilfredo Alonso Delgado Prado, así del subdirector médico por quebrantar la normatividad.El grupo parlamentario del PRI solicitó que se investigue a fondo este tráfico de influencias en el programa de vacunación de Sinaloa.Sergio Jacobo Gutiérrez, coordinador del grupo, dijo que ante este acto de influyentismo se abre la posibilidad de abrir un juicio político en contra del alcalde Emmett Soto Grave, por lo que esperan conocer a fondo la situación que privó en el Hospital General de Escuinapa.El secretario de Salud de Sinaloa, Efrén Encinas Torres, advirtió que habrá cero tolerancia a quienes no respeten la normatividad en la aplicación de las vacunas, cuyos lineamientos indican dar prioridad al personal de primera línea del Sector Salud.JM