Aunque esta ciudad fronteriza amaneció con un sol radiante, no se puede ocultar que la tromba que azotó la noche del lunes con saldo de dos personas muertas, 67 colonias inundadas y más de 200 fraccionamientos afectados, con cientos o miles de damnificados, dejó a su paso destrucción y muerte.El clamor generalizado es la pronta intervención de las autoridades estatales y municipales, porque la Guardia Nacional desde las primeras horas de este martes puso en marcha el Plan DN-III-E en las colonias más castigadas por las inundaciones.Los informes de la alcaldesa Maki Ortiz señalan que cayeron 5.5 pulgadas de lluvia y se instalaron tres albergues en los cuales se atendieron a 95 personas, pero no informa sobre la cantidad de personas damnificadas, muchas de ellas no pudieron salir de sus domicilios.Pero la realidad en las colonias afectadas e inundadas es otra, miles de familias pasaron la noche con el agua hasta la cintura, y se negaron a dejar sus casas porque era imposible salir a menos que fuera nadando.Prácticamente las familias fueron prisioneras en sus propios domicilios, pues era imposible salir de sus viviendas, y sus pertenencias, ropas, televisiones, abanicos, refrigeradores y estufas, quedaron bajo el agua.Nadie pudo rescatarlos, se quedaron en sus hogares por el temor a la rapiña y a perder algunas de las pocas cosas que lograron poner a salvo de las aguas que por momentos se metía a chorros.La ciudad de Reynosa carece de drenaje pluvial y todo el drenaje que hay en las más de 400 colonias es doméstico, el cual se colapsa con la caída de al menos dos pulgadas de agua.Por tal motivo, desde anoche, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) envió 15 bombas para desaguar las 67 colonias que prácticamente quedaron bajo el agua.El recuento de los daños se espera hoy en la tarde, ya cuando las casas hayan quedado libres de agua, y será hasta entonces cuando la evaluación arrojará resultados.Por su parte, el gobernador Francisco García Cabeza de Vaca, en un escueto tuit llamó al Consejo Estatal de Protección Civil para sesionar y trasladarse a su ciudad natal, Reynosa, para evaluar los daños que dejó esta tromba.Pero al mediodía todavía no sesionaba el Consejo Estatal de Protección Civil, y las autoridades convocadas, como la Secretaría de Marina y Secretaría de la Defensa Nacional estaban a la espera, por lo que se dieron a la tarea de poner en marcha el Plan DN-III-E.Cabe señalar que en el tuit del gobernador Cabeza de Vaca, no se convoca al ayuntamiento de Reynosa que encabeza Maki Ortiz Domínguez, quien tuvo que recorrer algunas colonias con el agua a las rodillas, donde recibió reclamos de los damnificados.JM