El tema de la violencia, la mayor preocupación de los mexicanos, marcó el tercer y último debate presidencial, aunque a los aspirantes que buscan tomar las riendas del país les faltaron las propuestas y les sobraron los ataques. Xóchitl Gálvez, de la coalición que conforman los partidos Revolucionario Institucional (PRI), Acción Nacional (PAN) y de la Revolución Democrática (PRD), insistió en ligar al Gobierno federal con el narco. La hidalguense aseguró que agencias de seguridad de Estados Unidos indagan a Mario Delgado, dirigente nacional de Morena, por “huachicoleo”. También citó el libro “La historia secreta: AMLO y el Cártel de Sinaloa”, de Anabel Hernández, que presume supuestos nexos de los cárteles con Andrés Manuel López Obrador (AMLO) y con Sheinbaum. Claudia Sheinbaum, abanderada de Morena, Partido del Trabajo y el Verde, alegó que la crisis de asesinatos comenzó con la “guerra contra el narco” durante la Presidencia de Felipe Calderón (2006-2012) y siguió con el Gobierno de Enrique Peña Nieto (2012-2018). “Hasta que llegó el Presidente Andrés Manuel López Obrador y cambió la política de declarar la guerra a construir la paz, que es una visión completamente distinta, que sí es atención a las causas y también cero impunidad”, argumentó la ex jefa de Gobierno de la CDMX. Ante esto, Álvarez Máynez, de Movimiento Ciudadano (MC), comentó que “el actual Gobierno, que prometió una nueva estrategia de seguridad, no la cambió, siguió el militarismo y el punitivismo. También siguió el desmantelamiento de las policías”. En el terreno de las iniciativas, Xóchitl Gálvez prometió una nueva estrategia “que diga adiós a los abrazos” y fortalecer a las policías municipales. Sheinbaum se comprometió a continuar con la política de pacificación del Presidente López Obrador, de “abrazos y no balazos”, y a reforzar a la Guardia Nacional. Álvarez Máynez apostó por reconfigurar los delitos de alto impacto y contribuir al “blindaje” de las corporaciones estatales y federales, de manera que sean esas dependencias las que enfrenten al crimen organizado en lugar de las Fuerzas Armadas. Para María Elena Morera, presidenta de la organización Causa en Común, que se especializa en temas de seguridad, en el ejercicio “ninguno dio respuesta a las preguntas, así que no supimos más de lo que ya sabíamos”.La activista criticó que Gálvez “desaprovechó la oportunidad de pegar en el tema de seguridad, quizá (estaba) cansada por la manifestación (de ayer en el Zócalo de la Ciudad de México), pero no se justifica”, mientras que Sheinbaum “resistió y mintió. Hay muchos más homicidios, pero los esconden en ‘otros delitos contra la vida’ y en ‘muertes no identificadas’”. En el caso de Álvarez Máynez, Morera comentó que el naranja atacó a Xóchitl “¡con temas de hace 20 años! Y tratando de no tocar a Claudia”. Alfonso Gutiérrez Santillán, especialista en seguridad, determinó que los candidatos dejaron más dudas que certezas. “No aprovecharon la oportunidad para mostrar a todos los mexicanos cuáles van a ser sus estrategias para combatir la delincuencia común y la delincuencia organizada. Ni en sus ejes estratégicos hay algo novedoso, están proponiendo lo mismo que se ha hecho en administraciones pasadas”.“Sólo vi a la candidata Xóchitl Gálvez atacando a la otra, y a Claudia Sheinbaum presumiendo logros con cifras un poco manipuladas. Jorge Álvarez Máynez aprovechó ese enfrentamiento pero sin adentrarse (en las soluciones)”, subrayó. Marcos del Rosario Rodríguez, investigador del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO), coincidió en que no se abordó de buena manera el tema de la seguridad, que es “el que más le duele al Gobierno federal”. Añadió que el formato que preparó el Instituto Nacional Electoral (INE) no ayudó para que los candidatos expusieran sus planes con mayor claridad. La agrupación México Unido Contra la Delincuencia publicó un documento en el que llamó a tomar diversas medidas para combatir la inseguridad. Entre estas destacan retirar gradualmente a las Fuerzas Armadas de las labores de seguridad pública, generar una política integral de control de armas, realizar análisis diferenciados de los delitos y reducir la cifra negra de ilícitos. “Los homicidios y feminicidios no ceden, las desapariciones aumentan, los delitos de violencia familiar y de género presentan incrementos constantes... y el Gobierno ha respondido con una estrategia equivocada de militarización”, acentuó. Entre las “Crónicas marcianas” y “La Heredera” se desarrolló una vez más un nuevo (y el último) debate rumbo a la Presidencia de México, entre los candidatos que tuvieron su última oportunidad para, cara a cara, hablar sobre sus propuestas y confrontarse sobre su visión de Gobierno de llegar a ocupar el puesto en la elección del próximo 2 de junio. Esto en la teoría, porque en la práctica continuaron los reproches y señalamientos, entre la insistencia de Xóchitl Gálvez, de la coalición “Fuerza y Corazón por México”, de llamar a Claudia Sheinbaum de “Sigamos Haciendo Historia” como “la candidata de las mentiras” y la obstinación de Sheinbaum Pardo de señalar que todos los males actuales vinieron de los Gobiernos de Fox, Calderón y Peña Nieto, de los partidos que hoy representa Gálvez Ruiz. Aunque ambas trataron de seguir haciendo a un lado a Jorge Álvarez Máynez, de Movimiento Ciudadano, por concentrar sus ataques de “coalición contra coalición”, el candidato emecista intentó sortear algunos ganchos haciendo un llamado al voto útil y señalando el movimiento inmobiliario de Vicente Fox que permitió el crecimiento desmedido de la vivienda en las periferias, pero también insistiendo en que Morena no pudo acabar con la pobreza extrema que hoy es más alta que antes de su Gobierno ni con los homicidios y las desapariciones, según aseveró en sus intervenciones recibiendo pocos “golpes cruzados” de regreso por parte de las candidatas.Volviendo a los libros, Xóchitl Gálvez usó la publicación del libro “La heredera”, de Anabel Hernández, para señalar que en este se establece que los testigos protegidos de Genaro García Luna son los mismos que aseguraron haber dado dinero para la campaña de Sheinbaum, ante lo cual, aseveró, “ya presentó una denuncia”.Al respecto la morenista se sacudió las acusaciones indicando que el libro no tiene fuentes confiables, y le recomendó mejor leer otras historias de géneros similares, como “ciencia ficción”, o el ejemplar de “Crónicas Marcianas”, del escritor Ray Bradbury, cuyos relatos carecen de una línea argumental lineal fija.En otros flashazos del debate, mientras Máynez puntualizó que de llegar a ser presidente hará valer el título del Ejecutivo como líder supremo de las Fuerzas Armadas, Xóchitl Gálvez dijo que ella lideraría personalmente la Comisión Nacional de Búsqueda. Claudia no se quedó atrás, y dijo que, como presidenta, ella comandaría todas las estrategias de seguridad en reuniones diarias a las seis horas de la mañana.Las candidaturas lucieron más cómodas con el formato de este último ejercicio, puesto que en su última etapa pudieron responder cuestionamientos que ellas mismas habían planteado. Todo se definirá en las urnas el próximo 2 de junio. 1. Incrementar el salario mínimo a 10 mil pesos mensuales e impulsar la jornada digna de 40 horas, es decir, dar dos días de descanso a las y los trabajadores. 2. Impulsar una nueva política que beneficie a la primera infancia desde todas sus perspectivas. 3. Sumar a un millón de jóvenes a las universidades con apoyos para que terminen la escuela. 4. Impulsar una nueva política de salud universal que garantice igualdad y transversalidad de todos los grupos sociales, además de impulsar un sistema de cuidados. 5. Exigir respeto en las fronteras Norte y Sur para “dejar de ser el patio trasero de Estados Unidos”. 6. Impulsar las políticas necesarias para atraer a las empresas extranjeras, especialmente asiáticas. 1. Adelantar la pensión para los adultos mayores desde los 60 años. Impulsar que la beca para la niñez y las juventudes sea universal. 2. Regresar las escuelas de tiempo completo y las estancias infantiles cerradas por la actual administración. 3. Impulsar un nuevo Seguro Popular con medicamentos bien abastecidos y dando cobertura completa a todos los tipos de cáncer que ataquen a la mujer. 4. Construir más universidades en todo el país y devolver el dinero que se quitó a la ciencia y a la tecnología para impulsar nuevamente la investigación. 5. Impulsar cinco millones de viviendas dignas, promoviendo un subsidio para las madres solteras, jóvenes y para quienes menos tienen. 6. Propone poner fin al “huachicol fiscal”. 1. Sumar más escuelas como las impulsadas en la Ciudad de México para que los jóvenes tengan la oportunidad de estudiar, así como impulsar su acceso a la cultura y deporte. 2. Crear un millón de vivienda social que beneficie a las juventudes, y abrir la posibilidad de pasar de la renta a la compra de su casa propia. 3. Impulsar las Farmacias del Bienestar para llevar medicamento gratuito a todo el país. 4. Aumentar el salario mínimo, primero a 2.5 canastas básicas, para después garantizar que no sea por debajo de la inflación. 5. Que el programa de “Jóvenes Construyendo” el Futuro sea constitucional y esté protegido por ley. 6. Atender las causas estructurales para evitar que llos mexicanos migren por necesidad. Voz del experto Mónica Montaño Reyes, coordinadora del Observatorio de Procesos Políticos y Electorales del CUCSHEl último debate de las candidaturas a la Presidencia de la República no definirá la elección; sin embargo, sí ayudará a un sector minoritario a definir su voto.La coordinadora del Observatorio de Procesos Políticos y Electorales del CUCSH, Mónica Montaño Reyes, explicó que el debate realizado ayer por los candidatos presidenciales ayudará a un 15% del electorado a decidir su voto, pero esto difícilmente cambiará el sentido de la elección porque la mayoría ya generó una simpatía hacia alguna fuerza política.“La mayoría de las personas ya tienen definido su voto, según todas las teorías que existen, tanto de la comunicación política como de los debates, que si tú eres simpatizante de alguno de ellos vas a tomar el debate para fortalecer tus simpatías, pero sí sabemos que hay un 15% que elige estando frente a las boletas. A esas personas se dirigen las mayores influencias en los debates”, explicó.En cuanto a las propuestas, la especialista señaló su agrado por las propuestas referentes a la niñez y a las mujeres presentadas por Jorge Álvarez Máynez y Claudia Sheinbaum.“No hubo nada nuevo, sobre todo en política social, no hay grandes propuestas, más que propuestas de apoyar mujeres de Sheinbaum, pero es un tema de adultos mayores, y el tema de Máynez de las infancias. Creo que eso no se había visto en los otros debates, todo lo enfocado a los niños. Creo que tocar temas de que en la infancia se pueden prevenir futuros abusadores, violadores y delincuentes es lo que me pareció novedoso”, profundizó.Para la especialista, Claudia Sheinbaum ganó los tres debates porque siempre habló como una futura gobernante y haciendo referencia a experiencias anteriores. El último debate presidencial se llevó a cabo el día de ayer y las candidaturas, una vez más, dejaron las propuestas de lado para hacer alusiones personales y ataques entre ellos mismos, en el debate titulado por la Comisión Temporal de Debates del Instituto Nacional Electoral, “Democracia y Gobierno: diálogos constructivos”.En el debate, realizado en el Centro Cultural Universitario Tlatelolco de la Universidad Nacional Autónoma de México, los temas colocados en la discusión de las candidaturas fueron: política social, inseguridad y crimen organizado, migración y política exterior, así como democracia, división de poderes y pluralismo.Sin embargo, los expertos coinciden en que una vez más el candidato de Movimiento Ciudadano, Jorge Álvarez Máynez, así como las candidatas de la coalición “Fuerza y Corazón por México”, Xóchitl Gálvez, y de la coalición “Sigamos Haciendo Historia”, Claudia Sheinbaum, invirtieron su tiempo en ataques a los integrantes de los equipos de campaña.Mónica Montaño Reyes, coordinadora del Observatorio de Procesos Políticos y Electorales del CUCSH, expresó la falta de propuestas novedosas en este debate, “No hubo nada nuevo, sobre todo en política social, no hay grandes propuestas, más que propuestas de apoyar a mujeres, Sheinbaum, tema de Máynez de las infancias, tocar temas de que en la infancia se pueden prevenir futuros abusadores, violadores y delincuentes”, expresó la investigadora.Por su parte, Marcos del Rosario Rodríguez, director del Departamento de Estudios Sociopolíticos y Jurídicos del ITESO, explicó que dejaron mucho que desear, principalmente en el tema del crimen organizado, más cuando en este periodo uno de los principales desafíos será la posible coacción del voto por parte de grupos criminales.Aunque reconocieron que fue el debate presidencial con menos ataques de los tres realizados en este proceso electoral, perdieron la oportunidad de dar a conocer sus propuestas al electorado.Los moderadores del ejercicio democrático fueron los periodistas Javier Solórzano Zinser, Luisa Cantú Ríos y Elena Arcila Solís. CT