La reforma de ley para reducir la jornada de 48 a 40 horas, y llegar a dos días de descanso, tendrá un largo recorrido y ya ha causado varias opiniones, principalmente de organismos empresarialmente. La pregunta aquí es: ¿Por qué si debería reducirse la jornada laboral y por qué no?La especialista Rosa Sumaya Tostado, coordinadora de la Licenciatura en Contador Público Internacional y Finanzas de CETYS Tijuana, resaltó las dos opiniones contrapuestas:“Ante estas dos versiones es prudente mencionar a los países que tienen las jornadas más cortas de trabajo semanal: Holanda con 29.5 horas, Dinamarca, cuya media es de 32.5 horas y Noruega con 33.6 horas y, por otra parte, a los países en vías de desarrollo donde la semana laboral es más larga, según análisis de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) que incluyó a 38 países, mostró a dos países en Latinoamérica: Estos son México con 2225 horas anuales y Costa Rica con 2212”, refirió la académica de CETYS Universidad.Es verdad que la jornada laboral puede representar a los empresarios un mayor costo o una disminución de la producción o de los servicios prestados, una cuestión de costos adicionales o menores ingresos y, también, se tiene que ver que los trabajadores son seres sociales y con ello con necesidades humanas de mayor acercamiento a sus entornos familiares. Naturalmente que estos puntos de vista, difícilmente podrán estar de acuerdo cuando de por medio va la cuestión económica y por otro, la cuestión social, humana.“La reducción de la jornada laboral siempre será una aspiración de los trabajadores, tarde o temprano será posible si las condiciones económicas del país son las adecuadas, tratan bien a los empresarios, los gobiernos los apoyan y los trabajadores se convierten en mejores trabajadores, no más esclavizados sino más eficientes. Todo es cuestión de un cambio cultural que vea más por lo humano y menos por material y este cambio no es cuestión de leyes nada más, sino de una transformación social a fondo”, analizó.El próximo periodo ordinario de sesiones se abre hasta septiembre, hasta entonces se podrá analizar y votarse para también sea enviado al Senado, luego a los Congresos Locales de los Estados y finalmente al Ejecutivo para ser promulgada, en casa de ser aceptados por todos ellos.OA