El próximo 2 de julio, el Presidente Andrés Manuel López Obrador va a inaugurar la refinería Olmeca, que le costará a México 15 mil 350 millones de dólares (MDD) en total, incluyendo costos de operación y gastos fijos de las instalaciones por un periodo de 20 años.Desde un inicio, la inversión para el complejo ubicado en Dos Bocas, Tabasco, se estimó en ocho mil 900 millones de dólares, sin incluir los gastos de fijos y de operación.A la fecha, de acuerdo con informes anuales 2019, 2020 y 2021de Pemex, así como las actas de su Consejo de Administración, las aportaciones patrimoniales recibidas del gobierno para la construcción de la refinería suman en tres años y tres meses 10 mil 650 MDD.A ese monto se deben agregar 626 MDD correspondientes a una erogación anual de 31.3 MDD para la operación de las instalaciones en dos décadas, así como cuatro mil 74 MDD más, que significan 20 pagos anuales de 203.7 MDD para gastos fijos en las instalaciones. Los compromisos que incluyen la puesta en operación de la refinería Olmeca y la contribución del complejo texano Deer Park, cuya compra fue cerrada por Pemex a principios de este año, plantean que “es posible esperar una producción de gasolinas de 516.5 mil barriles diarios (MBD) en promedio en 2022”, dijo el director de Pemex, Octavio Romero Oropeza.Para 2023, el planteamiento que hizo el funcionario a finales del año pasado ante el presidente López Obrador, al presentar las 10 Tareas para el Fortalecimiento de Pemex, la petrolera estatal estaría colocando en el mercado 775.6 mil barriles diarios de gasolinas en sus tipos Magna y Premium, y para 2024 colocará 858 MBD.En ese momento, el director de Pemex también programó una producción promedio de gasolinas para enero de este año de 363 mil barriles diarios, en febrero 417 MBD, en marzo 565 MBD y en abril también 565 MBD.Sin embargo, los reportes operativos de la petrolera estatal arrojan que en enero produjo 271.2 mil barriles diarios de gasolinas, en febrero 309.1 MBD, en marzo 272.5 MBD y en abril 302.7 MBD, niveles por debajo del compromiso. El principal escollo al que se puede enfrentar el Sistema Nacional de Refinación (SNR), que incluye las seis refinerías que actualmente opera Pemex en el país, el nuevo complejo de Dos Bocas y Deer Park, es la falta de petróleo suficiente para alimentarlo.Según información a la que EL UNIVERSAL tuvo acceso, así como proyecciones de la Secretaría de Energía (Sener) y del director de Pemex, la petrolera estatal comprometió un millón 509 mil barriles diarios de petróleo crudo para el sistema en 2022.De ese total, un millón 200 mil barriles serán para las refinerías del país, y 309 mil barriles diarios para Deer Park, vía exportaciones que Pemex hace a Estados Unidos.Pero la producción promedio de petróleo crudo de Pemex y sus socios, entre enero y abril de este año, alcanzó un millón 461.1 mil barriles diarios, de acuerdo con la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH). Si se agrega la contribución de productores privados, el promedio de esos cuatro meses llega a un millón 629.2 mil barriles diarios.Para 2023, Pemex aseguró que podrá enviar a las refinerías un promedio de dos millones de barriles de crudo al día: un millón 337 mil barriles para el SNR, 340 mil para la nueva refinería de Dos Bocas y 323 mil barriles diarios para Deer Park. Esos mismos volúmenes se comprometieron para 2024.Sin embargo, en su Prospectiva de Producción de Petróleo, Actualización al Cierre del Primer Trimestre de 2022, la CNH prevé que, en un escenario medio, Pemex y los privados producirán un millón 685 mil barriles de petróleo crudo en promedio en 2023, es decir, 315 mil barriles menos de lo comprometido.La estimación de la CNH para 2024, año para el cual Pemex también comprometió una plataforma de dos millones de barriles de crudo al día, son que la producción llegará a un millón 735 mil barriles diarios, es decir 265 mil barriles menos de lo que requiere procesar en conjunto todo el SNR.Además, en el Programa para el Desarrollo del Sistema Eléctrico Nacional 2022-2026, presentado el pasado 6 de junio, la Sener reconoce que será hasta 2024 y no el próximo año cuando se alcance la autosuficiencia en combustibles y se deje de exportar petróleo crudo.
