A pedido de la presidenta electa, Claudia Sheinbaum, la reforma judicial se discutirá hasta el martes 3 de septiembre y no el domingo 1, con el fin de evitar violaciones a la ley y no aprobar la iniciativa vía fast track, es decir, sin seguir los procesos legislativos y sin debatirse ni analizarse en el pleno.“Lo que (ella) ha sugerido al grupo parlamentario es que sea cuidadoso el grupo con toda la etapa procesal, que no se vulnere ninguna etapa procesal y que no se precipite, sino que observemos estrictamente la ley. Es una sugerencia que me parece correcta”, declaró Ricardo Monreal, ya nombrado como el próximo coordinador de la bancada de Morena en la Cámara de Diputados.En un principio, se pretendía discutir la iniciativa presidencial el próximo domingo, primer día de funciones de la nueva Legislatura y mismo día en que el Mandatario federal, Andrés Manuel López Obrador, presentará su sexto y último Informe de Gobierno. Aunque se habló de aprobar la reforma judicial el 1 de septiembre, esto no sucederá, según Monreal.“Ese día, en una sesión distinta, vamos a dar los plazos de la publicidad, la deliberación, la discusión en lo general, la discusión en lo particular para hacer amplio el debate, que sepan todos los mexicanos lo que estamos aprobando. Es la sugerencia de la presidenta Claudia Sheinbaum”.Según el trámite para discutir cualquier reforma legal o constitucional en la Cámara de Diputados, la iniciativa en cuestión debe publicarse en la Gaceta Parlamentaria, presentarse para una primera lectura en el pleno y abrir paso a la discusión para permitir la presentación de reservas por parte de los legisladores que así lo decidan. Posteriormente, la propuesta se somete a votación en lo general y se debate en lo particular para hacer modificaciones secundarias.Sin embargo, en varias ocasiones el Congreso de la Unión se ha saltado estos pasos y se votan directamente las iniciativas. A eso se le conoce como fast track o vía rápida. La polémica reforma judicial, cuyo dictamen fue aprobado este lunes, ha sido fuente de disputas entre el Gobierno federal y socios comerciales como Estados Unidos y Canadá, así como organismos empresariales e internacionales.El rector de la Universidad de Guadalajara, Ricardo Villanueva, señaló que se debe ampliar la discusión sobre la reforma judicial, al considerar que se está reduciendo la discusión y el debate a la elección de jueces, magistrados y ministros, por lo que se debe ampliar para abarcar también a las fiscalías y hacerlas autónomas.“Eso es lo que deberíamos de estar poniendo en la mesa, más allá de la elección de los jueces, yo diría que un debate pertinente es, ¿y los fiscales cuándo?”, analizó. “A mí me parece más pertinente un fiscal autónomo electo por votación popular, quitarle a los gobernantes el peso de la procuración de justicia para que se dediquen más a las calles y carreteras y poner entes especializados en la procuración de justicia”.En su rueda de prensa de ayer, Claudia Sheinbaum Pardo agregó que, de las 20 reformas anunciadas por Andrés Manuel López Obrador en su “Plan C”, la reforma electoral es la única que no será aprobada por el nuevo Congreso de la Unión y quedará pendiente para después.Esa iniciativa proponía, entre otras cosas, transformar al INE en el Instituto Nacional de Elecciones y Consultas (INEC), elegir a los consejeros electorales por voto popular, reducir a la mitad el número de senadores (128 a 64) o desaparecer la figura de los diputados plurinominales. CT