Al cumplirse el octavo aniversario del fallecimiento del obispo de San Cristóbal de las Casas, Samuel Ruiz García, miles de fieles católicos participaron en una peregrinación para manifestarse en contra de la falta de empleo, inseguridad y presencia del crimen organizado en sus comunidades, y se pronunciaron en contra del Tren Maya y el programa Sembrando Vida y la Guardia Nacional.Los católicos de las regiones Altos, Fronteriza, Selva y Norte, donde tiene presencia la Diócesis de San Cristóbal de las Casas, se concentraron en la salida hacia Comitán, desde donde caminaron a la Catedral.Con pancartas y flores, los católicos de las etnias chol, tzotzil, tojolabal, tzeltal y otras, se manifestaron su molestia en contra de las empresas transnacionales y caciques que "provocan contaminación y destrucción de los recursos naturales" de las comunidades.Se manifestaron en contra de la presencia de la Marina, Ejército y grupos civiles armados en las regiones donde habitan."Frente a esto exigimos: No a la militarización y paramilitarización en las comunidades. Alto a las amenazas y persecuciones contra quienes luchan por el bien del pueblo. Nos pronunciamos en contra de la legalización de las drogas, la venta indiscriminada de alcohol y la proliferación de la prostitución", dijeron los fieles católicos en el escrito "Palabra del pueblo creyente", en el octavo aniversario de la Pascua de Jtatic Samuel.Frente a la Catedral, los fieles católicos participaron en una ceremonia religiosa, donde quemaron incienso y participaron en la eucaristía, con la presencia de diáconos indígenas.Al dar lectura al documento, los creyentes dijeron que "en las comunidades hay mucha inseguridad: asaltos, robos, secuestros, asesinatos de personas, vuelos nocturnos de helicópteros y avionetas, los enfrentamientos del crimen organizado que atentan contra la vida del pueblo; la violencia que se vive en las comunidades y pueblos".Pidieron solución a los conflictos por límites territoriales en entre los municipios de Chenalhó y Chalchihuitán, Santa Martha y Aldama; y Chavajebal (municipio de El Bosque) y Amatán.También exigieron que se combata a los "grupos de poder" que tienen presencia en varios municipios de Chiapas, porque "son parte de la delincuencia organizada".Se opusieron a los proyectos como represas hidroeléctricas, la autopista San Cristóbal-Palenque, la construcción del Tren Maya y proyectos mineros en las comunidades, porque únicamente generan conflictos y despojo.Rechazaron el programa del gobierno federal Sembrando Vida porque, dijeron, "es un proyecto que engaña a la gente". También se oponen a la creación de la Guardia Nacional.JM