La noche de este martes, la Secretaría de Seguridad Pública de Oaxaca (SSPO) justificó el desalojo de la saxofonista y activista María Elena Ríos Ortiz de la función vespertina del primer Lunes del Cerro, luego que ella protestara contra los feminicidios en la entidad y desplegara una manta con la leyenda "Oaxaca feminicida".María Elena Ríos Ortiz es una saxofonista y comunicóloga de la región Mixteca, quien sobrevivió a un intento de feminicidio perpetrado a través de un ataque con ácido, el 9 de septiembre de 2019. Sin embargo, a la fecha, el quinto presunto agresor, Juan Antonio Vera Hernández, hijo del presunto autor intelectual, Juan Vera Carrizal, empresario y ex legislador, continúa prófugo.María Elena decidió hacer la protesta pacífica en nombre de todas las mujeres asesinadas en Oaxaca. El Grupo de Estudios sobre la Mujer Rosario Castellanos (GES Mujer) documenta, en lo que va de la actual administración, 660 asesinatos violentos de mujeres.Asimismo, narra que tras desplegar la manta, ésta le fue arrebatada y decenas de elementos de seguridad la sacaron por la fuerza del Auditorio Guelaguetza.A través de un comunicado, la SSPO aseveró que la manta de María Elena obstaculizaba la visibilidad a las y los asistentes a la Guelaguetza y que fueron éstos los que forcejearon con María Elena y su hermana, quienes sostenían la manta. Asimismo, añade que la policía sólo hizo presencia para "disuadir el conflicto" y evitar un incidente mayor, por el número de asistentes: además, justifica que los elementos de seguridad no tocaron a la joven en ningún momento.Lo anterior, a pesar de que en los videos difundidos se aprecia el forcejeo y desalojo de Ríos Ortiz por diversos policías empleados para disuadir la protesta pacífica de sólo dos personas. Asimismo, la SSPO señala que la dependencia se mantendrá atenta ante los requerimientos de cualquier carpeta de investigación que se inicie por el caso, a fin de "evitar la impunidad".Como respuesta, María Elena Ríos señaló a través de Twitter que la intención del comunicado es, "limpiar la imagen y borrar los feminicidios de Oaxaca a través del lucro de la cultura oaxaqueña a través de una Guelaguetza privatizada". Además, pidió la atención de la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca (DDHPO). MA