Un joven de 32 años identificado como Wilfrido, murió mientras estaba detenido en los separos de San Andrés Chicahuaxtla, en el municipio de Putla de Guerrero. Las autoridades locales confirmaron el deceso y afirmaron que se trató de un suicidio.Según la versión de las autoridades, el joven acudió a la agencia municipal en estado de ebriedad, donde ofendió a los presentes y comenzó a "retar a la autoridad y agredir a los demás que estaban ahí", por lo que fue detenido y apresado en los separos. "Logró tirarme en el piso, yo no puse resistencia, me levanté y nuevamente volvió a tirarme. En el lugar estaban varias personas. Enseguida le comenté a los elementos de la policía y a otros integrantes de la autoridad que estaban ahí que lo pusieran en los separos, para que no hiciera más escándalos", detalló Rubén Vásquez Hernández, agente municipal de Chicahuaxtla.Wilfrido había acudido a la reunión que dos días antes había convocado el agente para planear la próxima fiesta patronal de Chicahuaxtla.El agente Vásquez reconoció que no se siguió el protocolo de seguridad al momento de detener al joven, pero aseguró que éste no presentó resistencia, además afirmó, que la detención sólo sería mientras terminaba la reunión de Cabildo; sin embargo, al buscarlo para ponerlo en libertad ya estaba sin vida. Tras el deceso, las autoridades mandaron a llamar a una enfermera de la comunidad para que verificará el fallecimiento de Wilfrido."Estamos en la mejor disposición para cualquier aclaración de los familiares, así como de las autoridades correspondientes para que resuelvan el caso. Igual, sabemos el derecho de los familiares de la víctima para que pudieran proceder conforme a derecho, para que no quede impune el tema, si es que así lo ven, como injusticia por parte de nosotros", agregó Rubén Vázquez.Hasta el momento, la Fiscalía General del Estado de Oaxaca (FGEO) no ha confirmado los motivos del deceso de Wilfrido, vecino de San Andrés Chicahuaxtla, ubicado en la Mixteca de Oaxaca.Este caso se suma a otros cinco casos de personas que han muerto en cárceles municipales del estado sólo en lo que va de 2022, de acuerdo con la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca (DDHPO).